Capítulo 37 "Don de curar"

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Narra Anderson

Perdí la noción del tiempo cuando deje que el viento chocara mi piel y tomara fuerza para lanzar por los aires algunos mechones de color avellana que adornaban mi rostro a los costados, me sentía llena y parte de la naturaleza y por un instante desee ser un frondoso árbol acariciando por sus suaves remolinos.

Cerré los ojos disfrutando del momento, sin importarme las miradas de los demás, un suspiro solté de mi boca con una sonrisa plasmada ¿Cuanto tiempo llevaba en esa posición? Segundos para luego convertirse en minutos pero quería que durara toda la eternidad.

El sonido de los alrededores se volvieron en silencio que yo misma hice, las palmas de mis manos tocaron el poco césped que había y mis piernas estaban cruzadas con mi espalda recargada ,dándole sólo oportunidad a mis brazos que se encargarán de mi poco peso.

~No te duermas~Susurro cerca de mi oído con su voz grave y firme~Aún faltan otras horas.

Horas...

Más horas pasaría en este parque sentada, aunque agradecí mentalmente cuando unos niños se pusieron a jugar frente a mi ,siendo un espectáculo para mis ojos por sus risas agudas, fue inevitable pensar en cómo me depararía el destino si fuera madre.

¿Sería buena, mala, extremadamente tonta para ese rol o sería la mejor que podría existir en este mundo? Siempre ame la idea de tener una familia, en tener esa motivación para seguir día con día, en sentir el caluroso significado de un hogar, en la necesidad obsesiva de dar la vida por alguien , algo que tenía claro es que mi abuela estaba siendo consumida por los años y que desde muy pequeña me decía constantemente que quería verme formar una familia y si es posible conocer a su bisnietos.

Para mi poca suerte aún no llegaba ni a la mitad de esa vida soñada.

No pasaba de ilusiones...

~¿Has pensado en tener una familia?~Solté de la nada mirando a los niños, él pareció interesarle mi pregunta que se sentó a mi lado copiando mi acción.

~Es una de mis metas~Hablo y coloco su mano cerca de la mía, que hasta podría sentir sus roces~Desde hace años lo planeaba, lo platicaba con ella emocionado mientras comíamos dulces~Río por lo bajo~Sabes~Volteo a verme~Decíamos que íbamos tener cientos de animales mientras que yo les tocaba canciones con mi guitarra para que se durmieran, se que suena bobo pero lo considerábamos como nuestro mayor sueño.

Su manera tan emocionante en contarme hizo que él sonriera de oreja a oreja, de cierta manera eso fue algo doloroso para mi ,no sabría si descifrarlo.

Algo crujió.

~Entiendo,hablas de tu chica de hace años~Baje mi vista~Suena gracioso y tierno.

El noto mi acción que se quedó callado unos segundos y luego alzó mi mentón con una mano, soltando un escalofrío en mi por su piel fría.

~Ella ya no está, me soltó hace mucho tiempo y yo aprendí a hacerlo también~Sus ojos buscaron los míos~Fue cuando te conocí Anderson y me desmoronaste~Su pulgar acariciaba mi mejilla e hizo una pausa~El primer amor jamás se olvida pero puedo hacer que el último dure para siempre.

Una sonrisa de lado se formó en mi, aquellas palabras hizo que creciera una esperanza en nosotros, tal vez estábamos siendo impulsivos por un beso pero la conexión cuando existe es algo que jamás se quita y eso me pasaba, no necesite meses o incluso años para convencerme que quería estar con él porque siempre había un impulso incontrolable.

~¿Hoy no me llamarás "bicho"?~Pregunte en un tono divertido.

~Hoy no~Afirmó~Serás Anderson, mi Anderson.

Aidan Gallagher | LO DIFÍCIL  DE CONECTAR |(+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora