La llegada al nuevo hogar era algo sorpresivo para Gulf, al ver el lindo lugar en el que viviría, sonrió ampliamente y abrazo más al dragón, quien aún lo tenía en su regazo.
El Dragón con cuidado descendencia y al hacerlo cambia de forma teniendo a Gulf en sus brazos y luego lo baja.
—Sé bienvenido a tu nuevo hogar, mi pequeño ángel.
Mew muy feliz le da la bienvenida levantando su mano derecha y mostrando completamente su reino y el nuevo hogar.
—Su Palacio es enorme, jamás creí que un lugar así podría existir. Si tiene un lugar tan grande con una maravillosa vista, ¿por qué siempre ibas a la aldea?
—Desde pequeño eres curioso.
Dicho así camino y las grandes puertas del palacio se abrieron y entro siendo seguido por Gulf quien no perdía de vista ningún pequeño detalle a su alrededor.
—Este es tu hogar ahora y referente a lo que me preguntabas. Tenía mis motivos para ir, te lo he dicho ya; Eres tú lo que tanto buscaba. Y encerrado jamás te iba a encontrar. Puedes ir donde gustes aquí, oficialmente serás mi esposo en 3 días más, cuando la luna llena esté en lo alto del cielo.
—Será como pida mi señor. Aunque necesito hacer una pregunta.
—Hazla de forma libre, si puedo responder lo haré.
Mew se detiene y voltea a mirar a Gulf quien jugaba con su anillo de forma muy nerviosa y solo su respiración se podía escuchar.
—Habla sin miedo, no dudes en hablar o preguntar lo que quieras.
—Es solo señor que estaba tan feliz y emocionado de que solo tome la decisión de irme con usted por mi gran amor de años.
—¿Te preocupa no ver otra vez a tu familia?
—Sí, mi señor, solo me fui sin decir adiós.
—Esa aldea me gusta demasiado, no creas que estaremos siempre encerrados aquí, claramente los visitaremos cuando tú gustes hacerlo, incluso diariamente para que no pierdas la comunicación con tu familia y la gente que te conoce.
—Mi señor es muy generoso, muchas gracias.
Mew sonríe y se acerca a Gulf. Delicadamente, toma su rostro y levanta su mentón para que lo mire a los ojos.
—Eres mi pequeño ángel eterno, estás aquí a mi lado otra vez, no importan los años que te haya esperado, porque la espera valió la pena si ahora te puedo tener entre mis brazos nuevamente vida mía.
—¿Nuevamente mi señor? ¿A qué se refiere?
Aquella conversación se ve interrumpida cuando una mujer de edad sale al encuentro del Dios Dragón.
—¡Aquí está mi señor! Me asusté al no verlo en su cama, ¿por qué despertó antes?
—Respira Zafiro. Desperté porque la persona que he buscado por años me llamo y fui a su encuentro. Zafiro, él es Gulf.
—Un placer saludar a la señora. Soy Gulf, es un gusto conocerla.
Gulf realiza una corta reverencia ante la mujer que parecía tener unos 53 años o más y solo lo miraba atentamente sin articular palabra.
—Zafiro, es de mala educación, no saludar y solo observa de forma intimidante.
—Lo sé mi señor, solo no pensé que en esta oportunidad sería un aldeano.
—¿Un aldeano? ¿En esta oportunidad?
Gulf miraba al Dios de forma extraña, haciendo entender que estaba realmente confundido ante los dichos de aquella mujer y los dichos del Dios Dragón anteriormente cuando la conversación fue interrumpida.
—Es algo que debemos hablar. Zafiro, prepara una habitación para Gulf y que preparen para 3 días más una gran boda.
—Será como ordene mi señor. Permiso, voy a cumplir sus pedidos.
Aquella mujer hace una corta reverencia y se retira dejando a los amantes solos.
—Pedí otra habitación para ti, ya que debe ser un poco incómodo para ti por ahora dormir a mi lado. ¿Estás bien con eso?
—Sí señor.
—Vamos adentro, debes estar cansado. Es bueno que comas algo y luego descanses.
—Señor… La verdad es que estoy en dudas con varios de sus dichos y los dichos que ella.
—Los resolveré después de que logres descansar.
Mew se voltea y emprende nuevamente el camino adentro del palacio, donde es recibido por sus empleados que realizan una corta reverencia y seguían sus labores.
—Este es tu hogar ahora, puedes hacer lo que gustes e ir donde quieras.
—Se lo agradezco, señor.
—Gulf, ya eres mi prometido. ¿No deberías dejar de decirme, señor?
—Lo sé, solo que es la costumbre, trataré de cambiar esas palabras.
—Subiré a mi habitación a bañarme, si quieres haz un recorrido por el palacio y familiarízate.
—Así lo haré mi señor.
Mew le ofrece una sonrisa y se va a su habitación, dejando a Gulf mirando alrededor del palacio.
Empieza a caminar y los empleados lo reverencian al verlo pasar. Reverencia que devuelve Gulf con una sonrisa y seguía avanzando.
Cuadros de gran tamaño adornaban las paredes y miraba con gran atención cada uno de ellos que parecían ser ya muy antigüos y de lugares que jamás imagino que existían.
—Ahora que lo pienso, no sé realmente la edad del Dios Dragón. ¿Qué edad tendría? Se lo preguntaré más tarde.
Siguió avanzando hasta llegar a lo que parecía ser una puerta que no había sido abierta por un tiempo.
Al abrirla, la habitación estaba oscura, como pudo llegó a las ventanas y corrió las cortinas.
Al hacerlo la claridad empezó a entrar a la gran habitación que pudo observar con gran asombro al mirar grandes cuadros de lo que parecía ser el mismo.
—¿Qué es todo esto? ¿Soy yo? Aquí existe una escritura.
•Mi amado Kana, mi ángel, siempre te recordaré con gran amor y cariño. Estoy seguro de que en la próxima vida nos volveremos a encontrar como lo prometimos.
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Perdón por la falta de ortografía 🙏
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Gracias por tomarte el tiempo de leer mi historia.
Bendiciónes ☀️🌻
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"El pequeño ángel del Dios Dragón 2"
Fantasy𝐒𝐢𝐧𝐨𝐩𝐬𝐢𝐬 El perder lo más preciado es un duro golpe para tu vida, pero siempre queda una promesa que debes cumplir y ser feliz. Mew cargo a Kana ya débil hasta el río. Kana nuevamente lo hizo prometer que no se cerraría al amor y así lo prom...