En un mundo donde la humanidad se encuentra acorralada por titanes fuera de las Murallas, surge un nuevo capitán de la Legión de Exploración: Goku, un guerrero humano con habilidades físicas extraordinarias.
Los titanes habian podido entrar despues de la patada del titan colosal pero Goku habia acabado con el y salvaria a Christa.
Goku: Preocúpate mas por donde andas Christa todo esto es peligroso entendiste.
Christa: Si capitán pero se que siempre me salvaras.
Ella sonreiría muy agradablemente y nuestro protagonista se marcharia.
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Goku: (para sí mismo) Es hora de ver de qué están hechos estos jóvenes.
El sol descendía en el horizonte, pintando el cielo de tonos cálidos. En la distancia, un estruendo resonó, anunciando la llegada de un grupo de titanes en dirección a Trost. Goku sonrió, anticipando el desafío que se avecinaba.
Goku: (dirigiéndose a los reclutas) Bien, chicos, parece que la acción no espera. Vamos a ver de qué son capaces.
Mikasa, Eren, Jean, Sasha y los demás, aunque inicialmente sorprendidos por la partida de la Legión de Reconocimiento, se pusieron en acción. Goku dividió a los reclutas en equipos, asignando tareas estratégicas a cada uno.
El grupo se dispersó por Trost, enfrentándose a los titanes que se aproximaban. Goku, desde las alturas, observaba atentamente, evaluando la coordinación y el desempeño de cada equipo.
Mikasa y Eren demostraron una sincronización impresionante, trabajando en conjunto para derribar a un titán errante. Jean lideró su escuadrón con astucia, aprovechando el terreno para emboscar a los titanes. Sasha, con su destreza en el manejo de la ballesta, eliminaba titanes a distancia.
A medida que la batalla se desarrollaba, Goku identificaba las fortalezas y debilidades de cada recluta. Su enfoque estaba en observar cómo se enfrentaban a la adversidad y si eran capaces de adaptarse a las situaciones cambiantes.
El sonido de las cuchillas chocando contra la carne de los titanes llenaba el aire. Los reclutas luchaban con valentía, superando el miedo inicial y demostrando su determinación para proteger la ciudad.
Goku, satisfecho con la actuación de los reclutas, decidió intervenir para poner a prueba sus habilidades. Descendió de las murallas y se unió a la batalla, enfrentándose a un titán con una agilidad asombrosa.
Goku: (dirigiéndose a los reclutas) ¡Vamos, chicos! ¡Muéstrenme lo que pueden hacer!
La coordinación mejoró cuando los reclutas vieron a su capitán liderando el frente. Trabajaron en conjunto, aprendiendo rápidamente a adaptarse a las tácticas de Goku. La batalla era feroz, pero los reclutas, motivados por la presencia y liderazgo de Goku, demostraron su valía.
Mikasa, Eren, Jean, Sasha y los demás, respirando con dificultad pero llenos de determinación, asintieron ante las palabras de Goku. La ciudad de Trost, una vez más, había resistido el embate de los titanes gracias a la valentía de sus defensores.
