Jade no estaba muy segura de qué esperaba Beck con su apuesta. ¿Qué quería que hiciera? ¿Que le declarara su amor a Tori? Eso era ridículo ¿Que la besara frente a todos? ¿Que le pidiera que fuera su novia? No, eso era demasiado. Jade no sentía nada por Tori, solo una leve curiosidad por saber por qué le prestaba tanta atención. Y quizás un poco de admiración por su talento y su personalidad. Y tal vez una pizca de atracción por su belleza y su sonrisa. Nada que no pudiera ignorar o reprimir, o que sea característico de un sentimiento romántico.
Beck, en cambio, parecía muy confiado en su apuesta. Estaba seguro de que Tori estaba loca por Jade, y que solo hacía falta un pequeño gesto para que se lo confesara. Beck conocía bien a Tori, habían sido amigos desde que ella llegó a Hollywood Arts, y habían compartido muchos momentos juntos. Beck sabía que Tori era una chica dulce, generosa, valiente y divertida, pero también muy tímida y reservada con sus sentimientos, creía que necesitaba un poco de ayuda para abrirse y expresar lo que sentía por Jade.
Por eso, Beck decidió poner en marcha su plan para acercarlas. El primer paso era conseguir que Jade le hablara a Tori de forma casual y amistosa, sin ser grosera ni hostil. Beck sabía que eso era difícil para Jade, que siempre se mostraba fría y sarcástica con los demás y aún más con Tori, pero también sabía que ella tenía un lado más suave y sensible, que solo mostraba con él o con Cat, su mejor amiga. Beck pensó que si Jade le hablaba a Tori con normalidad como sino la odiara, quizás Tori se animaría a hablarle más y a mostrarle su interés.
Así que, al día siguiente, se acercó a la gótica en el pasillo, cuando la vio caminar hacia su casillero. Jade lo miró con recelo, sabiendo que venía a hablarle de la apuesta.
- Hola, Jade - la saludó con una sonrisa.
- Hola, Beck - respondió con sequedad.
- ¿Qué tal tu día?
- Bien, supongo.
- ¿Y el tuyo?
- Bien, también.
- ¿Sabes? Hoy hay una audición para el musical de primavera.
- ¿Y?
- Y creo que deberías ir.
- ¿Por qué?
- Porque eres una gran actriz y cantante, y seguro que consigues un papel.
- ¿Eso es todo?
- No, también porque Tori va a ir.
- ¿Y eso qué tiene que ver?
- Pues que podrías aprovechar para hablar con ella
- ¿Para qué?
- Para conocerla mejor, para hacerle un cumplido sobre su actuación, eso le gustaría mucho viniendo de ti.
- No quiero nada de eso.
- Vamos, Jade, no seas tan dura.
- No, gracias.
- Jade, por favor, solo te pido que le hables un poco, nada más. Es parte de la apuesta, ¿recuerdas?
- ¿Qué apuesta?
- La apuesta que hicimos ayer, sobre si Tori está enamorada de ti o no.
- Ah, sí, esa apuesta estúpida.
- No es estúpida, es divertida. Y te puede traer muchas sorpresas.
- No me gustan las sorpresas, quiero ganar.
- Bueno, entonces tienes que hacer lo que yo digo.
- ¿Por qué?
- Porque yo soy el que sabe cómo hacer que Tori se enamore de ti.
