¿¡Soy Ginny Weasley!?

Partido de quidditch y perdida en otro universo

Finalmente el tan esperado día había llegado, hoy era el partido de Quidditch y yo no podía estar más nerviosa por ese hecho, suspiré mirándome al espejo mientras terminaba de arreglar mi cabello y sonreí con emoción y nervios dentro de mí, detrás de mí estaban Polly, Haley y Maya, se preparaban de igual manera para apoyar a Gryffindor en el partido.

— Te ves genial, Gin —me sonrió Haley desde su cama, iba como usual solo que con la cara pintada de los colores de nuestra casa, le sonreí devuelta agradeciéndole.

—Van a ganar el partido, no estés nerviosa —dijo Maya mientras se sentaba y me sonreía levemente.

—Exacto! Y si no lo hacen, al menos se vieron increíbles con esos uniformes —sonrió con entusiasmo Polly y yo reí levemente pues se lo había mostrado antes y le había encantado.

Sabía que íbamos a ganar, pero me daba miedo arruinar la jugada o equivocarme en algo, me miré por última vez, mi rojo cabello estaba atado en una coleta alta, pero con un lazo para darle mi toque.

Bajé las escaleras junto a las chicas dirigiéndonos al GC mientras charlábamos, al pasar había gente que me deseaba suerte en el partido, sonreí.

Al adentrarnos en el bullicio de la gente charlando con alegría en el comedor, me despedí de ellas y fui con Ron, Hermione y Harry con una brillante sonrisa, me senté al lado de Harry.

—Buenos días, muero de hambre —agarré varias salchichas y las puse en mi plato, miré a Harry con severidad.

—Si no empiezas a comer, te lanzaré por la ventana.

Harry me miró con terror cuando vio mi cara seria y se sirvió dos salchichas, sonreí.

—Eso es.

Luego de unas horas, todos los estudiantes y profesores se reunieron alrededor del campo de Quidditch, me miré en el espejo de los vestuarios observando el uniforme, y sonreí para después ver a Harry quien parecía que en cualquier momento explotaría de los nervios, me acerqué a él.

—Lo harás bien, tranquilo.

Le sonreí y luego Oliver se aclaró la garganta para dar su discurso, sonreí divertida.

—Bueno, chicos —comenzó a decir.

—Y chicas —añadió Angelina y sonreí.

—Y chicas —repitió Oliver—. Éste es...

—El grande —dijo Fred.

—El que estábamos esperando —continuó George.

—Nos sabemos de memoria el discurso de Oliver —dijo Fred hacia nosotros y yo reí un poco—. Estábamos en el equipo el año pasado

—Cállense los dos —ordenó Oliver y los miré con burla—. Éste es el mejor equipo que Gryffindor ha tenido en muchos años. Y vamos a ganar.

Nos lanzó una mirada de «O si no...» justo como en el libro.

Ya era la hora del partido así que luego de que Oliver nos deseara suerte, salimos de los vestuarios y en el momento en el que pise el campo de Quidditch y los vítores y aplausos se hicieron presente, euforia recorrió mi cuerpo.

Hooch dijo lo que ya saben y luego todos nos subimos a nuestras escobas y nos elevamos a nuestras posiciones dando comienzo al juego.

—Y la quaffle es atrapada de inmediato por Angelina Johnson de Gryffindor... Qué excelente cazadora es esta joven y, a propósito, también es muy guapa... —reí por lo que dijo Lee y cuando fue reprendido por Minnie.

— Aquí está la cazadora Katie Bell de Gryffindor, buen vuelo rodeando a Flint, vuelve a 122 elevarse del terreno de juego y... ¡Aaayyyy!, eso ha tenido que dolerle, un golpe de bludger en la nuca...