—¡ORDEN!
Exclamó alguien en el gran salón.
Las voces se apagaron de golpe, dejando un hilo de murmullos que se fue desvaneciendo poco a poco.
El lugar de paredes blancas casi grises, podría albergar el aroma de innumerables puros que se fumaban con regularidad en ese lugar. Había cuadros en tamaños medianos pintados por reconocidos artistas que, sí pudieran hablar, más o menos podrían indicar el número exacto.
Aún más allá de eso, el lugar donde las reuniones del parlamento se llevaban a cabo era tan mísero.
La alfombra parecía recibir poca limpieza, pero era solo debido a que el color era bastante opaco dando el aspecto a suciedad. Afuera las nubes eran grises por la lluvia, la habitación se iluminaba gracias a las luces amarillas de las lámparas viejas, ni con la poca luz natural que alcanzaba a filtrarse entre las transparentes cortinas, escondidas entre las más gruesas, quitaba el ambiente tan melancólico y mesurado.
Los alfas presentes discutían debido a las recientes elecciones para su primer ministro. Seymour Prescott era el favorito del pueblo, sobre todo de los detractores de la monarquía. El gabinete no permitiría que su popularidad tomara mucha relevancia entre los ciudadanos, por lo que, en un plan desesperado, propusieron una solución que atrajera la atención de los simpatizantes y fuera el príncipe quien llevara a cabo la tarea.
—Señores, les suplico que tomen esta situación con más seriedad. Prospectos de todos los reinos han sido considerados para asistir al baile de invierno, y por primera vez, se ha contemplado a gente fuera de la aristocracia para ampliar el panorama, minimizando rechazos. Si tenemos suerte, su alteza real quedará cautivado.
Alguno de los presentes bufó.
—Es una ilusión perdida —manifestó—. Me he comunicado con un miembro de la corte de Calen, el príncipe está dispuesto a comprometerse con su alteza, ¿por qué considerar otra sugerencia cuando la verdadera solución está aquí?
—Porqué Arlo Lantsou nunca será rey de Calen —comentó uno con burla desde el extremo de la mesa—. A su familia le parece más conveniente casarlo con el único heredero que existe en el reino de Nylinia.
—Lord Clayton Karlsson también está dispuesto —sugirió otro—, fue preparado para este momento desde que nació, prácticamente fue prometido a su alteza.
—¿Qué cosa le hizo asegurar a Lord Karlsson que podría ser considerado para ser prometido del príncipe? Ese evento solo sucedió en la imaginación de Bernhard.
—Reflexionemos, por favor. Ambos alfas vienen de familias bien posicionadas y son amistades del rey desde hace muchos años. Si tenemos estas dos propuestas, no entiendo que estamos esperando.
Algunos de los hombres estaban en total desacuerdo de crear un matrimonio forzado para el heredero. Cuando Xiao Junsu ascendió a la corona, muchos cambios se efectuaron durante su reinado, uno de ellos fue erradicar la costumbre de casarse con desconocidos o entre familiares. Lamentablemente eran pocos los miembros que se negaban a esa opción. Las disputas originaban la pérdida de los estribos de aquellos hombres, pero ninguno llegaba a levantarse de la silla para asestarle un golpe al otro.
—¿Qué es todo este alboroto, caballeros?
Las cabezas de los sujetos se giraron en dirección a las puertas.
El rey de Nylinia entraba en la sala. Los alfas se levantaron de inmediato de sus lugares, acomodando los sacos de sus respectivos trajes e hicieron una reverencia para su majestad.
Aquel monarca tan jovial, siempre llevaba una sonrisa en el rostro, se quitó los guantes entregándoselos a un sirviente que entró justo detrás. Su traje lucia tan pulcro, llevando un pañuelo rojo en el bolsillo de lado izquierdo que funcionaba como vista.
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LUNA EN ATARDECER || YIZHAN
FanfictionEn un mundo alterno, donde la sociedad se ha dividido en ALFAS/OMEGAS/BETAS, se halla un reino bajo el nombre de Nylinia. El príncipe Xiao Zhan, heredero a la corona, ha sido orillado a contraer nupcias con alguien que no ama. La lista de candidato...