LUNA EN ATARDECER || YIZHAN

1. CORONA DE LAGRIMAS

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A vísperas de noche buena, la familia real se dispone a viajar al condado de Mireille —ubicado al sur de Álvea—, lugar donde se sitúa el antiguo y magnífico palacio de Norling; mejor conocido como el palacio de oro

La luz natural del día y la luz artificial que ilumina por la noche, crean un efecto con tonalidades brillantes y doradas, haciendo parecer que sus muros fueron fabricados con dicho material amarillezco. Es una de las tantas residencias que la familia dispone, teniendo un gran valor sentimental, por no decir que es la favorita.

Se construyó a las afueras de la ciudad, entre un paisaje boscoso que se pinta de blanco cuando el invierno alcanza la cumbre a finales del mes, y se pinta de verde cuando llega la primavera.

La vivienda no solo es elegida para un respiro de labores del soberano, sino para realizar el baile anual de invierno, brindando a sus invitados un viaje en el tiempo rumbo al siglo XVIII, por la atmósfera de cuento de hadas que ofrece y perdura en cada rincón.

Con antelación, expertos dan el mantenimiento indispensable a las instalaciones, para que la estadía del rey Xiao Kyungil y su esposa, la reina consorte Xiao Meiyin, sea satisfactoria.

Por consiguiente, la servidumbre se encarga de ordenar y limpiar, reemplazando las flores de algunos jarrones con las más frescas repartiéndolas entre habitaciones y espacios privados que serán ocupados por sus majestades y su hijo, el príncipe y ciervo de Nylinia, Xiao Zhan.

Hace años, el baile de invierno era una de las festividades que el príncipe esperaba con avidez, solo que su ufanía no estaba relacionada al baile como todos pensaban. Para él significaba la temporada de regalos y la culminación de la escuela por unas largas semanas.

Siendo tan pequeño, no lo consideraban para asistir a la gran noche, se la pasaba con sus niñeras hasta que lo mandaban a dormir a las nueve. Logró asistir a la festividad dos años antes de presentarse su celo, los presentes no pararon de halagarlo ni honrar su presencia, tampoco dejaron de suponer que sería un alfa, lo que le hizo experimentar una gran desilusión por imaginar que sería algo mas memorable.

Todo tomó un rumbo distinto a partir de que el príncipe se manifestó como omega. Los que tomaron respetuosa distancia años atrás, ahora lo orillaban a conocer y bailar con algunos miembros jóvenes de la corte. Buscaban desesperadamente como casamenteros que su príncipe se enamorara de un noble, formando una relación que lo llevara finalmente a casarse, asegurando así la línea de sucesión.

En ese entonces estaba entrando en su pre adolescencia, por lo que formar un vínculo no tenía ninguna relevancia para él, su único interés era ir a Peyton y cabalgar, o alimentar a los caballos de la familia.

Contraer nupcias no formaba parte de sus planes ni teniendo veinte años, al menos no con una persona que no amara.

Zhan era un romántico empedernido y eso nadie lo sabía. Por supuesto que anhelaba como todos hallar a su destinado, ese alguien que lo haría enamorarse profundamente, haciéndole desear cosas a las que no se viera obligado, manteniendo un lazo que perduraría por mucho tiempo.

Con solo veinticuatro años, su anhelo por encontrar a ese alguien en Nylinia, se quebrantaba.

Al finalizar sus estudios universitarios, decidió tomar la vía de escape más eficiente, realizaría su servicio militar por los siguientes dos años y medio, así lo dejarían en paz. Con su regreso reciente al palacio, creyó que finalmente el tema lo habían dejado y le harían encontrar lo que quisiera.