Joyas

35 3 0
                                    

“Ninguna joya brilla más que la inocencia y pureza de una mascota”

Las joyería nos hace lucirnos en público, nos hace sentir importantes, valiosos, poderosos.

Pero en un momento el dinero ni el costo es tan valioso como el amor de una mascota que con solo estar ahí a nuestro lado nos hace la persona más feliz y afortunada del mundo.

Al igual o aún más que las mayores joyas, nos hacen deslumbrar.

No tienen precio, son genuinas, son de lo más importante en nuestros corazones, sean heridos o suertudamente sanos.

Yo me siento el más afortunado al tener mis joyas con plumas.

Cuando el mundo te trata de destruir y tú sin qué decir, hacer, pensar. Solo observas como lentamente consume toda tu alma, pero aún así sin perder la calma.

La sociedad impone el valor de los lujos por encima del amor y el precio de la sinceridad es un monto superior.


Joyas que salvan tu vida, alegran día a día, joyas brillantes con un pasado radiante.

Radían tanta paz, que con solo verlas te dan el valor, te sientes capaz, capaz de avanzar.

Joyas tan valiosas que darías la vida por protegerlas, mantener su esplendor intacto y que el mundo no lo torne opaco.

Te das cuenta cuenta de que no eres nada sin ellas, porque son tus estrellas.

Te hacen feliz, te hacen bien, las necesitas acá a tu lado y de joyas no hemos hablado.

-Evs

Sentimientos Poéticos: El Primer PasoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora