En el Espejo

♔ VIII ♔

— Nos vamos a casar —

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Esas palabras hicieron que Yoongi se enfureciera, no quería estar atado a una mujer que no quería, lo quería a él, quería a Hoseok, no lo conocía tanto pero en sus ojos se podía ver lo cual maravilloso es, tenía que acelerar el proceso de cortejarlo pero no sabía cómo hacerlo sin que sus padres se dieran cuenta sería difícil.

La noche estaba por caer y su cuerpo todavía seguía sentado pensando en como hacer que Hoseok se fijara en su persona, tal vez solo le diría sus intenciones con el, pero sería rudo y poco romántico por su parte, había otra opción que necesitaba a Namjoon un fuerte regalo romántico, o simplemente conocerlo mejor, pensó tantas elecciones de como enamorarlo que entre todas solo escogió aquellas tres, su cabeza dolía por estresarse con ello, así que sin aviso fue a dónde se encontraba Namjoon.

Caminando por los pasillos extensos y silenciosos escucho algo que significativamente le alteró.

— Entonces Hobi Hyung.. ¿Te gusta alguien? — esa voz, no sabía de quién era, pero no importaba, quería saber la respuesta del pelinegro.

— Bueno Kook... — silencio — La verdad es que si, me gusta alguien — gritos de emoción se escucharon, e incluso los de Namjoon que no parecía que fuera el que gritaba — Pero no sé si yo le gusto — silencio otra vez.

Parecía algo que Yoongi no creía, si a Hoseok le gusta una persona puede o no ser el, no pensó en la vida que el tenía en su época, tal vez le gustaba alguien que fuera de ese tiempo, o talvez alguien de allí.

— No puede ser — susurro para si mismo — ¿Tengo una oportunidad con el?

«No, no la tienes.»

Una voz, parecida a la suya, pero no vino del exterior, vino de su cabeza, ¿Acaso se estaba volviendo loco?

«Puede ser.»

Allí estaba otra vez.

Sacudió su cabeza para dejar de escuchar esa voz y por fin dió unos leves golpes a la puerta donde ellos estaban.

— Adelante — se escuchó a Seokjin.

Yoongi entró allí y vio como todos estaban sentados en el suelo, fijo su vista a Hoseok que estaba tomado de la mano con un desconocido de ropas negras.

Un silencio incómodo se formó, su mirada no se podía apartar de las manos unidas y eso Namjoon lo notó por lo que se levantó y de a empujones salió con Yoongi que no quería salir de allí.

— ¿Quien es el?

— Tranquilo Yoon, el es Jungkook.

— El es...

— Si el es el demonio — bajo su cabeza sin saber que hacer.

— ¿Por que le dice Hyung? — ahora su voz sonaba más grave.

— Tiene un espíritu de niño, no tiene otras intenciones con el — puso su mano en el hombro del pálido.

— Necesito que me ayudes con un asunto importante Nam — hablo un poco bajo.

— ¿Con Jihyo? — imitó su tono de voz.

— Dice que nos vamos a casar y que no hay vuelta atrás, lo sé pero sabes que con ella no quiero ni una amistad, así que necesito que me ayudes a-...