118 DC
Ese día estaba juntos a Nergal, Carlein y Klein juntos a nuestros hijos dándoles las condolencias a mi tío Daemon y a sus hijas que habían perdido a su esposa e madre, Laena Velaryon mi prima quien había muerto teniendo complicaciones en el parto, Laena y yo no eramos muy cercanas pero tampoco nos odiabamos, solo no nos sentíamos cómodas con las presencias de la una a la otra. Las hijas de tío Daemon eran preciosas, las niñas eran idénticas a su madre pero Baela heredó la actitud de su padre mientras que Rhaena tenía la actitud dulce y calmada de Laena, esa misma calma que Laena le dio a Daemon durante varios años.
Sonreí levemente a ver a Baelon acercarse a mi junto a Aemond —Baelon que grande está mi pequeño hermano —dije acariciado sus mechones blanco, el mencionado se sonrojo levemente.
—Hermana ya no soy un niño —exclamó el joven de quince días de nombre —Hermana, como saber Aemond no tiene dragón —menciono a lo que asistir, Aemond no poseía un dragón porque su huevo nunca exclosiono —Qué opina de que Aemond dome a Vhagar —preguntó Baelon, entrecerre mis ojos viendo a Aemond quién se puso nervioso ante mi mirada.
—Creo que sería excelente pero no debería intenta doma a Vhagar ahora o sino su tío Daemon y sus primas lo tomarán como un insultó hacia el funeral de su esposa e madre —dije, a los que los jóvenes enfrente mio asistieron —Ahora vallan y derlen sus condolencias a sus primas —ordene, los muchachos se despidieron y fueron hacia sus primas a dar sus condolencias, sonreí levemente a ver su interacción, era bueno que Alicent no dejará su odio en sus hijos y en Baelon, los niños eran inocentes de nuestra rivalidad y odio contra Rhaenyra.
Nergal se posicionó a mi lado mirando a nuestros hijos mayores Zayn Azrael, Vanya, Ash y Aysel que se había unido a Rhaena, Baela, Aemond, Baelon y Aegon. Los niños charlaba intantado anima a Rhaena y Baela. Mis hijos menores Eden y Lyall se quedaro
—Comienzo a sentí algo de lástima por las niñas, ellas aquí llorando y su padre cogiendo con Rhaenyra —abrí mis ojos de golpe mientras me volteaba y lo miraba, sus ojos rojizos brillaban con maldad.
—¿Qué? Daemon se está cogiendo a Rhaenyra en el funeral de su esposa —pregunté impactada, Nergal asiste divertido —Maldito viejo calentón —murmure molesta viendo con pena a las niñas.
Ash Lougty Relish Birdwhistle
Habían pasado dos días desde el funeral de lady Laena, Aemond y yo creímos que sería adecuado doma a Vhagar ahora mismo, acompañe a Aemond hasta la playa donde estaba la gran dragona verde durmiendo, Aemond se veía maravillado y emocionado a ver a la gran dragona yo también estaba emocionado de ver a la dragona aunque en DarkHell había muchos dragones y bestias más grandes que Vhagar, era la primera vez que estaba tan cerca de uno estando sin las presencias de uno de mis padres o el de mi madre, si mi madre se enterará me enteraría vivo y a mis padres los crucificarias, lo bueno es que ningunos de los cuatros sabía y papá Antlas esta en DarkHell cuidado a Lyall y Edén.
Aemond se acerco a la dragona y la criatura se despertó a escucha los pasos abrió sus fosas mostrando el fuego que amenazaba con salir de su fosa.
—Vhagar Cálmate —gritó Aemond en valyrio hacia la dragona, Aemond volvió a repetí lo mismo y la dragona cerró su hocico, Mire Aemond que se acercaba con cuidado a Vhagar y subió hasta su lomo, la emoción era evidente en mi tío —Vhagar vuela —Lo oír decir ante que la dragona saliera volado hacia los cielos, los gritos de euforias de Aemond se escuchaba hasta donde estaba yo y eso que Vhagar estaba volado demasiado alto, al principio Vhagar voló de manera agresiva intentado echar a Aemond de su lomo pero cuando vio que Aemond no estaba dispuesto soltarse de su lomo se calmó y voló de manera tranquila.
Lo espere pacientemente desde abajo, cuando Vhagar iba a baja escuche pisadas detrás míos, me voltee para ver quién era y era mis primos los hijos bastardos de mi tía Rhaenyra, iban acompañado de Baela y Rhaena quien era que parecía más enojada, Aemond bajo de él lomo de Vhagar y se posicionó a mi lado.
—¡Vhagar es el dragón de mi madre, debí ser yo quien la reclamará! —grito molesta Rhaena, la miramos molestos, los dragones no eran herencias y si ellos dejaban de tener jinetes cualquier Targaryen sin dragón podría reclamar.
Iba habla pero Aemond se adelantó —Tu madre está muerta —Soltó fríamente y cruelmente las palabras.
—Tal vez Jacaerys y Lucerys te puedan conseguir un cerdo con alas —hable con sarcasmo recordando la cruel broma que nos hizo Aegon junto a Lucerys y Jacaerys, solo porqué no teníamos dragón. Rhaena soltó un puñetazo hacia la cara de Aemond tomándome por sorpresa, Aemond se la regreso Baela fue hacia Rhaena para ayuda a su tonta y estúpida hermana, corrí hacia Aemond para ayudarlo cuando vi que Jacaerys junto Lucerys lo tumbaron a suelo y lo atacaron a patadas. Le metí un puñetazo a Baela en la cara que la dejó aturdida por el golpe, tome a Lucerys de los pelos y lo tire a suelo dándole una patada justo en su estómago que le saco el aire, mientras Lucerys y Baela intentaba recuperase, Aemond le metió un cabecetazo a la cara de Rhaena rompiéndo su nariz y haciendo que sangre, tomó a Jacaerys por el cuello mientras levantaba una piedra con su mano izquierda.
—Morirán gritado en llamas tal y como lo hizo su padre, bastardos —grito molesto.
—¡Mi padre está vivo! —grito Lucerys desde el suelo sosteniendo su estomago adolorido, solté una risa burlón.
—¿El aún no lo saber? Lord Strong —dije con burla, de repente Jacaerys saco un daga entre sus ropas, Aemond reaccionó rápidamente y se alejo dándole un fuerte golpe en la cabeza con la piedra que tenia en manos, ambos Strong estaba en el suelo adoloridos, Lucerys se arrastró por el suelo mientras su hermano mayor lo veía y de repente todo pasó tan rápido, Jacaerys tiro tierra sobre los ojos de Aemond, Lucerys se levanto y le corto la cara a Aemond, mire a mi tío agonizando en el suelo y lo último que recuerdo es sentí un agudo dolor en mi abdomen y a Jacaerys sacando la daga, los gritos de los guardias retumba con fuerza en mis oídos antes de deja que la oscuridad de apodere de mi.