Feelings [Bajifuyu]

21. Versátil.

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Categoría:
Smut / +18
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Versátil.

—¿Estás seguro de esto? —Preguntó un tanto inseguro. 

Baji sonrió de lado.

Chifuyu no podía creer lo que le decía ya que nunca lo había imaginado... Más bien, parecía que se estaba burlando y eso no le causaba gracia alguna. 

Baji en cambio, permaneció sentado apoyando sus brazos sobre el respaldo del sofá y observó a Chifuyu de manera provocativa. 

—A ti te gustaría metérmela, ¿no es así? —Bufó. 

Su aire descarado era alucinante. 

Chifuyu se tensó y el calor se le subió al rostro. 

—¿Has sido pasivo antes? 

Llevaban tres años saliendo, eran exclusivos sexualmente hablando... pero, quizá Keisuke lo había intentado en el pasado. 

—Yo pregunté primero Chifuyu. ¿Te gustaría metérmela, sí o no? 

¡Joder, sí! 

Únicamente asintió. 

—Entonces hagámoslo... 

Baji dio pequeñas palmadas en uno de sus muslos. Chifuyu sabía que esa era una instrucción para sentarse sobre él y devorarlo. 

Se acercó y lo hizo. 

Colocó sus piernas a los costados de su cadera y lo besó de manera intensa como siempre lo hace cuando pierde el pudor; enterró sus dedos en el cabello suelto de su novio y profundizó el beso dejándole sentir cómo su erección crecía bajo sus pantalones. 

Chifuyu se permitía ser atrevido de vez en cuando pero nunca había sido el activo. 

Decir que estaba nervioso era poco y no podía creer que Baji fuese versátil en el sexo.  

Era como volver a tener su primera vez... de cierta manera.

—Quiero tenerte adentro, Fuyu. —Suspiró cerca de su oreja dejando que su aliento choque contra su piel. 

Su casa estaba sola y tendrían el tiempo suficiente para hacer lo que quisieran. 

En cuanto se incorporó, ambos se deshicieron de la ropa con urgencia y la dejaron tirada sin ningún tipo de cuidado. 

Estaban en la sala del departamento y, aunque todas las persianas estaban cerradas, les parecía excitante caminar desnudos hasta el cuarto del rubio. 

La pubertad había sido generosa con ambos. 

Se convirtieron en hombres fuertes, atractivos y con cualidades que llamaban la atención de todos en la universidad. 

Chifuyu cerró la puerta y continuó besando a su novio. Estaba nervioso, sí. Pero no iba a dejar pasar la oportunidad. 

Baji se recostó sobre la cama del rubio y lo atrajo para profundizar sus besos. Si no se daba prisa, se arrepentiría y pondría a Chifuyu en cuatro para ser él quien lo penetre.