Aquel pequeño accidente nuestro [Jeongin]

Capítulo 31

Bren: ¡Te voy a matar T/n!

T/n: Perdóname, en serio no era mi intención.

Yo corria alrededor del sillón intentando esquivar el bolso de mi amiga furiosa. Era difícil de creer porque, después de todo, Bren era una persona pacífica y no era muy fácil hacerla enojar, además de que mientras me perseguía con su bolso en mano, soltaba carcajadas de a rato.

T/n: ¿Pero estás enojada o no?

Bren: ¿Y QUE TE PARECE?

T/n: Pero ya te pedí perdón.

Bren: Si, pero me DEJASTE SOLA. S-O-L-A.

T/n: Te hice un favor, así no le ibas a hablar en tu vida. O le hablabas o le hablabas.

Bren: ¿Pero vos te das cuenta de la vergüenza que pasé? No me ayudaste en nada.

Me sentía mal pero a la vez no, Bren me conocía, solía gustarme "ayudar" a la gente.

El timbre sonó (me salvó la campana dirían), era la comida que habíamos pedido, parece que la comida que habíamos comido en el parque no nos había alcanzado, o al menos a mí.

Respiré hondo aliviada, Bren resopló y caminó hacia la puerta con el objetivo de pagar y tomar el pedido.

Bren: De no ser que sonó el timbre te hubiese lanzado el bolso.

T/n: Vos no harías eso.

Bren: Depende de la situación, y está era perfecta para hacerlo.

Yo reí y me senté en la mesa para comer lo que habíamos pedido.

T/n: ¿Pero si hablaron?

Bren: Sí. —contestó con una mirada sería.

T/n: Aysh, dame una respuesta más completa.

Bren: Hablamos de todo, creo que se dió cuenta de que me gusta su grupo.

T/n: Uh, mira, yo ni me daba cuenta... —comenté con un ligero sarcasmo.

Bren: Sh, no era tan obvio —se defendió, a lo que le respondí con un gesto de "si vos lo decís". —, igual, cuando ya habíamos entablado una conversación, apareció Minho y se lo llevó.

T/n: Aah... Que lastima. —reí un poco, no quería seguir diciendo más nada y solo seguí comiendo.

Bren: ¿Y hablaste con Jeongin?

T/n: Si, un poco.

Bren: "Un poco"...

T/n: Si, poquito.

Bren: ¡Ay! Siempre es poquito, decimee.

T/n: Hablamos de cuánto se extraña la naturaleza y más.

Bren: Ay, que conversaciones más normales las de ustedes...

Suspiré y terminé mi comida, esperé a que Bren terminara lo suyo y junté los platos para luego lavarlos.

Bren: Che, ¿y vos seguís sin trabajo...?

T/n: Pues, se podría decir que sí.

Bren: ¿Cómo que "se podría decir que sí"?

T/n: El supermercado está cerrado por un tiempo así que, si. Estoy sin trabajo.

Bren: ¿Y que pensas hacer? Yo no te voy a mantener.

T/n: Ya voy a ver, por ahora, uso los ahorros. —respondí luego de soltar una carcajada.

Bren: Bueno, cualquier cosa, yo te ayudo.

T/n: Gracias.

Bren sonrío y se levantó de la mesa y subió a su habitación.