NO ERES TU

capitulo 08

¿que son las casualidades?

Aquellas que llegan en el momento indicado como accidentes que no se pueden prever ni evitar. Perfecto, pues todas las casualidades no siempre son encuentros deseados y el universo estaba conspirando en su contra sin lugar a duda, aquello ya no podía llamarlo casualidad lo comenzaría a ver como una maldición una que le impuso el universo quizas por ser tan promiscuo en su juventud.

Siquiera podía recordar el rostro de los hombres con los que alguna vez mantuvo una relación pero tampoco podia culparse, los extranjeros eran o al menos fueron su debilidad, muy fáciles de enredar, para nada conservadores y por sobre todo, perfectos para el rato.

-Katsuki es hora de ir a la caminadora-

-y una mierda-

-en tu ficha dice claramente que necesitas hacer ejercicios suaves para mantenerte en forma y mejorar tu condición física, no creí que eras tan delicado como para no poder alzar siquiera un par de pesas-

-las pesas y fuerza bruta son solo para bárbaros salvajes como lo dijiste tu mismo- Soltó ese simple comentario acompañado de un suspiro subiendo a la máquina caminadora sin siquiera regresar á mirar la expresión de Kirishima tras su comentario -prende ya esta mierda- pagar una suscripción por línea de un gimnasio incluyendo entrenador sin antes investigar a los dueños fue lo más tonto que había echo.

-primero una velocidad lenta, a medida que calientes subiré la velocidad a un trote medio-

Kirishima era serio cuando de su trabajo se trataba pero estaba haciendo su mayor esfuerzo por no echar a carcajearse por las muecas y gestos de desagrado que Katsuki le lanzaba cada que era corregido por un ejercicio mal hecho que realizaba o cuando se le ordenaba otra actividad. 

-quiero un reembolso-

-lo siento aquí se trabaja seriamente, no podemos cancelar una suscripción y menos aún si es en línea arruinaría todo nuestro cronograma de atención al cliente- y no mentía tenían un par de gimnasios en diferentes zonas y Kendo se estaba encargando de poner en marcha otro. 

- eres un infeliz, esto lo haces solo para joderme-

Una sonrisa socarrona se plasmó en el rostro de Kirishima tan solo guardando silencio, se alejó de su lado caminando hacia un tipo que levantaba espantosamente pesas y para su desgracia debía admitir que Eijiro con un conjunto de pantalones deportivos y camiseta sin mangas lo hacía ver tan malditamente sexi que llegaba a molestarlo aún mas.  

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- Katsuki esto no es un juego, no puedes simplemente decidir embarazarte y no cuidar del nuevo ser que crece en tu vientre, te mencioné claramente que los chequeos son sumamente importantes para un omega en gestación que no cuenta con la ayuda de un alfa - y con justa razón la reprimenda del especialista hacia Bakugou que ni siquiera podía refutar. La publicación de su libro lo consumió por completo sin contar los diferentes factores en los que se vio envuelto en sus días anteriores.

- tu peso deja mucho que desear, en una semana cumples tres meses y solo mírate, tu vientre a crecido tan poco como lo sería un vientre de tan solo un mes, tu condición física es terrible, tus caderas no han crecido lo cual es peligroso para cuando llegue el momento en que el bebé nazca -

El médico seguía mirando los exámenes y vaya que sus muecas de disgusto eran notorias, las manos de Katsuki viajaron lentamente hasta su vientre jugando nerviosamente con sus dedos entrelazandolos por debajo del escritorio.

-esto es un total desastre de tu parte, tu embarazo no es como el de otros omegas y estás consciente de ello pero aún así parece que te empeñas en que esto salga mal- la mirada de Bakugou se levantó de golpe encarando al mayor al frente suyo con el entrecejo fruncido.