Ambos llegaron a la pequeña casa que había alquilado Max, el mexicano venía feliz con las compras que había hecho y se fue directo a la cocina para comenzar, llamando a su hijo Patricio para que lo ayudara.
Por su parte Max estaba enojado pero no quería demostrarlo, necesitaba hablar con Liam, no podía dejar que Sergio lo odiara, Sergio era lo mejor que tenía y no podía perderlo.
Por lo cual tomó su celular y abrió el chat con su hijo, el cual el último mensaje tenía más de dos meses y sólo era un simple emoji.
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La conversación no llevo el rumbo que quería pero aún así tuvo que enviar la ubicación pues sabía que Checo lo cuestionaría si Liam no llegaba.
Solo esperaba que Liam no hiciera o dijera algo que no.
Liam fue solo a la cena, estaba preparándose mentalmente para cualquier cosa que pudiera pasar.
Así que al llegar a la dirección toco la puerta y quien lo recibió fue Sergio.
-Liam, adelante me alegra poder tenerte aquí.- El mencionado no estaba acostumbrado a la amabilidad de otros, solo lo de Yuki y su amigo.
-Gracias, me pone feliz estar aquí espero no ser una molestia.- Siguió al mayor hasta el comedor.
-Oh no es nada, nunca serías una molestia, ponte cómodo por favor, pensé que vendrías con Yuki.-
-El tuvo unas cosas que hacer, no pudo venir, pero agradece su invitación.- Liam miraba con cuidado el lugar. -¿Donde está mi papá?
-Ya viene, fue a comprar unas cosas que me hacían falta, aquí es difícil encontrar comida que sea de tu agrado, pero Max dijo que te gusta la comida japonesa, así que además de sushi hay takoyaki, Yakitori,Udon, algo de tempura.- Liam de enero y miró que había mucha comida en la mesa, no era muy fan de lo japonés pero aún así quería ser amable hasta que supiera las verdaderas intenciones de Sergio.
-Gracias Sergio, pero creo que es mucha comida, no deberías haberte molestado.-
-Puedes decirme Checo, y sobre eso, es para que puedas cenar a gusto y todo lo que gustes, además no lo hice todo yo solo, mi hijo me ayudó, él también vendrá en un momento, acompaño a Max a la tienda.-
-Checo, claro, ¿puedo preguntarle algunas cosas?- Liam estaba nervioso pero no quería demostrar aquello.
El mexicano tomó asiento frente al joven Verstappen para poder ponerle atención.
-Te escuchó, intentaré responderte de forma clara.- Sergio estaba dispuesto pues no era mentira, el realmente quería llevarse bien con Liam pues sabía que era importante pra Max, y él no tenía problema alguno con eso.
-¿Qué edad tiene?- Sergio lo pensó un momento.
-Tengo 45 tú tienes 19 ¿cierto?- Liam se sorprendió por dos cosas, el señor frente a él parecía menor así que le sorprendió su edad, y segundo que su padre supiera su edad y la haya compartido.
Pero sabía que no debí bajar la guardia pues no confiaba en Sergio, y todo lo que él estaba haciendo era actuado para poder vengarse de su padre.
-Si, cumplí los 19 hace poco ¿Que edad tiene su hijo?-
-Pato tiene 24 también recién cumplidos.-
-¿Cuando los cumplió.-
-Los cumplió el 6 de Mayo, no recuerdas, te enviamos la invitación para la fiesta pero cómo estabas ocupado no pudiste venir, tu padre dijo que ibas a ir a un viaje escolar.- Liam sentía que el nudo en la garganta volvía a aparecer y su estómago comenzaba a doler, en mayo su padre había tenido un "trabajo urgente" Justo por esas fechas, y claro que ahora sabía que esos trabajos urgentes era irse a pasear con su amante y su hijo.
Era tan irónico, Liam sentía como si fuera un señor con doble familia, y tal vez eso era pero su padre no estaba casado, y el hijo de su amante no era suyo, pero en esos momentos parecía otra cosa.
-Bueno... yo no reci...- No pudo acabar pues Justo en ese momento la puerta se abrió dejando entrar primero a Max y luego al hijo quien aún no podía verlo con claridad puesto que estaba detrás de su padre.
Pero era hora de ver como se llevaba todo este teatro, la función estaba por comenzar.
