4: Tragedy love

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Muchos gritos sonaban por doquier. El cuerpo le pesaba demasiado, sentía el aire entrar dolorosamente por sus pulmones y los músculos intercostales parecían querer romperse dentro de su cuerpo si intentaba respirar más.

Todo alrededor estaba difuso. Las caras de las personas no las lograba captar, pero si gritos. Muchos gritos exclamando una sola cosa: «¡Auxilio!» Y el estruendo de varios edificios caer, servicios y coches volando por varias direcciones.

Destellos eléctricos saliendo de las enormes pantallas. Chispas brincando por dónde sea, podía mirarse a si mismo parado en medio de todo el caos. Al parecer, estaba en medio de un ataque a su ciudad. Un ataque enorme.

Con un oponente fuerte.

«¡Cuidado!» Con su telaraña atrapó a la niña, poniéndola en un lugar seguro. Salvando su vida al no ser aplastada por la enorme pantalla destrozada en las calles hechas un desastre.

El humo que salía de los motores averiados de los autos nublaron su vista. Soobin tosió por la densa humedad y polvo levantado, con su mano trató de darse camino a la neblina de gas. Cuidando de no chocar con las personas que corrían desesperadas a todas direcciones buscando refugio contra aquel hombre que en un ataque de ira, hizo brotar más rayos eléctricos.

En su mente todo parecía ir en cámara lenta. Los sonidos parecían tan lejanos y Soobin sentía que su cuerpo casi no respondía a sus acciones pues las demoraba en realizar. Incluso sus sentidos se volvieron lentos, tan lentos que de no ser porque una mano tiró de la suya. Un auto lanzado contra él lo hubiera aplastado.

¿Dónde estaba? ¿Qué ocurría? Soobin no recordaba cómo habían llegado hasta esta situación. Miró arriba suyo, en esa enorme torre de reloj y enseguida su vista se enfocó solamente para ver a sus tres amigos luchando contra un mismo villano. El mismo hombre bañado de furia de antes.

«¿Por qué...?» Murmuró, creyó que no podía haber más de un hombre araña en un mismo sitio o toda la línea de tiempo se iría por la borda. Al menos, eso le dijo Taehyun.

Pero estaban peleando allá arriba con ese sujeto. Nada bien les estaba yendo porque pudo ver cómo con una enorme fuerza, lanzaba del pie a Kai hasta los metales sin uso. Atacando a los otros dos que le parecían moscas, pues el tipo intentó aplastar con un enorme pedazo de metal oxidado a Beomgyu pero él lo esquivo con un brinco y con la ayuda de Taehyun, se impulsaron ambos dándole doble patada que hizo al tipo estrellarse contra el pavimento. Soobin aún estaba en trance.

Su cabeza no daba vueltas pero no podía concentrarse.

«¡Ugh!» Con sus manos tocó su cabeza. Le punzaba, sus oídos estaban confundidos pues no lograban capturar de dónde provenían todos los sonidos. Soobin abrió los ojos adolorido por la fuerte migraña que parecía incrementar cada segundo. Solamente para abrir enormemente los ojos y quedar todo a su alrededor a oscuras. «¿Qué mierda pasa?»

Decidió caminar, los gritos se fueron. No veía nada más que oscuridad, entonces escuchó la voz de Beomgyu gritando: «Taehyun-ah, ve con él!» Mientras hacía ruidos de querer salirse de algún agarre aprensivo. Sin saber porqué razón, Soobin empezó a trotar y cuando menos lo supo, ya corría tan rápido como sus pies le daban oportunidad.

El aliento le faltaba pero por alguna razón, se sentía desesperado. Los gritos de Taehyun sonaban alarmados y entonces, Soobin fue bañado con una luz como si hubiera salido del túnel oscuro. Todo cobró visión y se detuvo abruptamente antes de dar otro paso adelante pues se encontraba al final del camino. En el interior de la torre del reloj. Justo en la parte más alta.

«¡Taehyun, Beomgyu, Kai!» Gritó. Sus tres amigos lo vieron con alivio, como si estuvieran esperando su presencia. Soobin intentó ayudarlos pero antes de que pudiera llegar hasta donde ellos, un fuerte impactó lo detuvo.

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⏰ Última actualización: Jan 29 ⏰

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