Miradas de diferentes tipos se notaban por toda aquella escuela, rumores sobre un nuevo profesor recorría cada oído en cada punto de la universidad, esperando pacientemente al saber quien era.
El timbre resonó por todo el lugar, el descansó habia terminado y varios suspiros de quejas se escuchaban.
La puerta se abrió ligeramente, haciéndose notar quien entraba.
-Buenos dias a todos, seré su nuevo profesor de filosofía, soy el profesor William-
Su tono de voz serio pero amable al mismo tiempo, hizo que algunos le sonrieran ligeramente, pero a aquel alumno, que podia verlo desde casi atrás de todos sus compañeros, su cuerpo sufrió un inquieto escalofrío.
Comenzó a hablar con una media sonrisa, explicando con detalle y seriedad todo lo relacionado con su clase, como no reprobar y obtener puntos extras, realmente se estaba tomando serio su trabajó, algo que hizo que Harrison sonriera algo satisfecho.
Los dias pasaban y parecía que el unico que lograba entender todas aquellas palabras era aquel alumno callado.
-Señor Harrison, ¿Podria ir a buscar una mesa?
La repentina petición de su profesor fue extraña, se levantó algo indeciso de su asiento y salió del salón, haciendo que el hombre sonriera al verlo irse.
-Cuando su compañero regresé, haré una pregunta totalmente sencilla, pero deberán responder mal.
El silenció se hizo mas presente esta ves, sin entender aquello pero asintiendo confundidos.
Harrison volvió con la mesa y la dejo cerca de su profesor, volviendo otra ves a su asiento, notando aquel silenció que lo hizo confundirse de inmediato.
-La filosofía es el amor por el conocimiento, algo que complementa la mayor parte de la vida, ¿Estoy en lo correcto?
El silencio aun se notaba y la incomodidad parecia hacerse presente, un alumno alzó la mano con un leve suspiró y accedió a hablar.
-La filosofía es el complemento necesario para llegar a saber sobre la biología humana.
El silenció habia vuelto a hacerse presente, el adulto en esa sala simplemente pudo soltar una leve risa.
El timbre habia sonado indicando otro descansó.
-Señor Harrison, quédese un momento.
Pudo asentir y acercarse a su profesor, notando la sonrisa de aquel mientras se miraban fijamente, notando como todos ya se habían ido del salón.
-¿Que sucede profesor William?
Decidió preguntar aun viéndolo curioso, sin entender lo que sucedia en aquel momento.
-¿Que le a parecido la clase de hoy señor Harrison?
-He notado su pequeña "broma" profesor William, muy sutil de su parte.
Comentó detenidamente mientras le sonreia algo ansioso a su profesor, mientras podía escuchar la suave risa del adulto.
El hombre pudo acariciar la cabeza de su alumno con demasiada delicadeza, pudo notar como se avergonzaba y sus mejillas se teñian de un color rojo.
-Escríbame si tiene alguna duda señor Harrison.
Le entregó un papel con su información personal para sonreirle e irse de aquel salón, dejando a su propio alumno confundido y sin entender toda esa extraña conversación.
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¿Trató amable? [Finalizada]
De TodoUn nuevo profesor de filosofía habia llegado a la universidad, "William Lambert", se trataba de un hombre llamativo y al parecer algo misterio por su carácter. "Harrison David", un estudiante resaltado ante todas sus asignaturas, un alumno ejemplar...