La desgracia había llegado para la casa Velaryon y Targaryen, pues Laena Velaryon , hija mayor de Lord Corlys Velaryon, Lord de Marcaderiva y de la princesa Rhaenys Targaryen, esposa del príncipe Daemon Targaryen y madre de Baela y Rhaena Targaryen, había muerto en el momento que estaba dando a luz a su tercer hijo. Esto para Aerys Targaryen, segundo hijo del rey Vyserys Targaryen y primer hijo de su segunda esposa Alicent Higthtower, era devastador, sabía que este hecho causaría más problemas en su casa.
Aerys es un joven muy inteligente y observador, es meticuloso y discreto, para tan solo tener 18 días de su nombre, ya pensaba como un hombre mayor, pues tuvo que madurar a temprana edad. Tanto su madre Alicent, como su abuelo Otto querían ponerlo a él como rey, y sentarlo en el Trono de Hierro, trono que le pertenece a su media hermana mayor Rhaenyra Targaryen, y Aerys era muy consciente de ello, y sabía que lo que hacía su familia materna era traición a la corona y el no estaba dispuesto a hacerlo. El no quería el trono, ni siquiera un lugar en la corte. Solo quería ser libre, volar por el cielo cual dragón. Su padre el rey Viserys nunca mostró afecto por él, es más ni siquiera lo trataba como su hijo, si no como un súbdito más, el amor del rey solo existía para su hija mayor y los hijos de esta. Su madre tampoco lo amaba, para ella el solo era su boleto al trono y nada más. Sus hermanos menores, Aegon, Aemond, Helaena y Daeron, eran los únicos que tenían aprecio por él, ya que al ser el mayor siempre los protegía, escuchaba, apoyaba y aconsejaba. Lo único que pasaba por la mente de Aerys era salvar a sus pequeños hermanos de una muerte horrible en una guerra sin sentido. El tenia en claro que a la familia no se la mata, y aunque su hermana no lo viera como tal, para él si era parte de su familia, como sus sobrinos Jacaerys, Lucerys y Joffrey Velaryon, y también quería protegerlos.
Luego del desagradable discurso que dio Vaemond Velaryon, remarcando que los hijos de Rhaenyra eran bastardo de forma indirecta, y que el cajón con el cuerpo carbonizado de Laena sea tirado al mar, Aerys se acercó con disimulo a sus dos sobrinos.
- Oigan, pequeños - los llamo con disimulo detrás de una pared donde su madre y abuelo no pidieran verlo, ambos Velaryon miraron a hacia él y se acercaron con prisa.
- Tío Aerys - dijieron ambos con emoción, pues los tres tenían una buena relación.
- ¿Como se encuentran? - Les pregunto el mayor, hincandose sobre una de sus rodillas para estar a la altura de ambos pelinegros.
- Cansados de todo - dice Jace, el mayor de los dos, con una mirada triste.
- Todos nos dejan y nos desprecian - dice con voz quebrada el pequeño Luke. Aerys acerca a ambos niños a él y los envuelve en un fuerte abrazo tratando de darles consuelo.
- No digas eso Luky - Le susurra en el oído - Ustedes son unos niños muy amados,y no solo por su madre, si no por mucha gente. No hagan caso de las palabras de gente que no son importante en su vida ¿entendido? - dice para separarce de ellos y regalarle una sonrisa a los niños. - Lamento mucho la muerte Harwin, era un gran hombre y un ejemplo a seguir. Honren su memoria siendo tan fuerte como él, no solo física sino mentalmente también, sin dejar que nadie pueda lastimarlos. Lleven consigo sus enseñanzas siempre y nunca las olviden ¿si?
- Si tío, gracias - dicen ambos niños con lágrimas en los ojos. Los tres vuelven a fundirse en un fuerte abrazo antes de separarse y seguir caminos distintos, sin saber ninguno de los tres que de lejos Rhaenyra los observaba con clara confuncion en su rostro, ella no entendía desde cuando sus hijos y su medio hermano eran tan cercanos.
Por otro lado Aerys con cautela se acercaba a Lord Corlys y la princesa Rhaenys para expresar sus condolencias, aunque debía admitir que tenía algo de miedo, pues sabía que los Velaryon no lo favorecían con su afecto por ser hijo de quien es.
