Capítulo 5. Parte 2.

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Subo desde el coche para ser recibida por la visión amenazante de tres grandes bloques de viviendas. La luna se asoma a través de un hueco que hay entre el primer y el segundo bloque casi aliviada cuando consiguió refugio para esconderse detrás de la nube que pasaba. Amable y accesible son dos palabras que claramente no usaría para promocionar estas viviendas. 

Harry tiene la cabeza echada hacia abajo con el dolor de lo que viene después. Me acerco a él. 

"Entraré si quieres que lo haga."

"Sí." Dice él sin pausa. 

Empujo mis llaves en el bolso mientras él camina a través de la calle conmigo siguiéndolo. Unos pasos al frente y se da cuenta de que me estoy quedando atrás, olvidando que él solía ser considerado conmigo debido a mis cortas piernas y caminar más lento junto a mí. 

Harry sostiene la puerta de entrada del segundo bloque de edificios, se lo agradezco mientras él me permite pasar primero. Huele un poco a humedad en el vestíbulo y asumo que es por los parches de colores sin ajustar en la esquina del techo. No hay bullicio, así que las personas pueden entrar y salir libremente. 

"Sólo será un minuto." Harry apunta suavemente. "Tengo que pagar la renta."

Él se fue a través de una pesada puerta de incendios y me abandona. Como estoy sola, camino lentamente al rededor del vestíbulo por mí misma. Una luz en la pared escamosa parpadea, un clic vidrioso cada pocos segundos para acompañar la música desagradable a todo volumen desde un coche de un muchacho que estaba afuera. Nosotros los habíamos pasado en el camino pero no les había prestado mucha atención, en lugar elegí quedarme cerca de Harry y orar por el anonimato. Tengo la urgencia de validar la seguridad de mi coche, ellos están probablemente robando partes del motor ahora mismo o jugando con los frenos. 

La puerta de entrada que usamos se abre repentinamente sorprendiéndome. Evalúo la situación concluyendo en dos hombres y una mujer. Su conversación termina cuando me ven. 

"¿Vives aquí?" La mujer con pelo peinado hacia atrás me pregunta. 

No estoy lo suficientemente segura de cual sería la respuesta correcta porque mi mente convoca a la misma imagen de mí siendo depredada sin importar un "sí" o un "no". Una breve decisión se apresuró a llegar. 

"No."

Uno de los hombres da un paso adelante, más abajo que la mujer y con un cabello teñido miel brillante. A pesar de que sus vaqueros son ceñidos, todavía cuelgan bajo su cuerpo fornido. 

"¿Estás perdida entonces?"

"No." Repito.

La incómoda sensación cavando en mi estómago se intensifica mientras una astuta sonrisa aparece entre ellos. En un esfuerzo consciente, para no convertirme en un fácil objetivo, cambié de lugar y me desplacé a la puerta que se adentraba en el edificio. 

"Mi amigo se fue por aquí, voy a ver si puedo encontrarle."

Mis antebrazos presionan a la madera en un falso sentido de la higiene inapropiada para la circunstancia actual. Es la menor de mis preocupaciones ahora que uno de ellos me ha seguido. Lo puedo deducir porque oigo la puerta cerrarse detrás de mí. 

"¿Y en qué piso está tu amigo?"

Me asomo por uno de los corredores derivados del pasillo principal y luego por el de enfrente. Es un maldito laberinto. 

"No lo sé, no me lo dijo."

Mi respuesta es cortante mientras me doy la vuelta para enfrentarme a ellos una vez más. La mujer y uno de los hombres están presentes en la sala conmigo, el otro está apoyado en el marco de la puerta con una sonrisa de complicidad. La forma de divertirse se desliza de su boca en una manera casi cómica y yo soy la última en entender porqué mientras los tres están pálidos. 

"Ella no quiere lo que están vendiendo" la voz de Harry hace eco. 

La mujer se ve atrapada entre los faroles mientras los hombres se retiran hacia atrás. Puedo sentir a Harry parado detrás de mí, junto con una extraña sensación de superioridad que hace que la gente se encoja en la distancia. "Es veintiocho, es veintiocho" el del fondo murmura en el frío repentino en la atmósfera. La mujer mueve su cabeza hacia abajo en sumisión, siguiendo a los otros que la han abandonado. 

Miro la puerta después de que se hayan ido y sólo me volteo al oír a Harry alejarse. Parece que paso la mayor parte de mi tiempo hablando con su espalda.

"¿Qué estaban vendiendo?"

Recibo un zumbido de humor a medida que seguimos jugando una versión pequeña de seguir al líder. Las puertas del ascensor se abren y Harry toma ora puerta que supongo que conduce a las escaleras. No sé que tan alto vamos a subir, pero incluso los graffitis dibujados en el interior del ascensor no dan ganas de subir las escaleras. 

"¿No vamos por el ascensor?" Llamo a través de la brecha disimulada gradualmente de la puerta al cerrarse. 

Puedo ver la parte de atrás de Harry a través de la pequeña ventana mientras se detiene en el primer escalón. Su cabeza gira ligeramente dirigiéndose hacia mí, y no tengo la actitud de ejercicio para detener la unión de las puertas del ascensor. 

"Yo  no lo haría." Responde. "Hay niños en el piso seis que le gusta golpearlo. No hay garantía de que lleguemos al tercero con vida. 

Desde luego, no voy a pasar mi noche atrapada en una caja de metal colgando sobre la probablemente muerte sólo para dar a algunos niños diversión. Troto después de Harry encontrándolo en la primera curva de las escaleras. Es un ascenso hacia el piso tres. 

"Las personas de abajo, cuando te vieron dijeron veintiocho. ¿qué significa eso?"

Pasamos el conjunto de las mismas puertas verdes descoloridas mientras caminamos por la longitud del pasillo desierto. El ruido de las televisiones se escucha desde algunos apartamentos, otros son un silencio sepulcral. 

"Eh.. vivo en el número veintiocho." Concluye Harry. 

Nos detenemos fuera de una puerta idéntica y Harry busca en su bolsillo las llaves. Es sólo cuando las luces del pasillo se encienden al tiempo de espera hasta que se apagan y el pasillo se oscurece progresivamente mientras entramos. Lo primero que pensé fue que esta no era su casa. La entrada principal da directamente a la sala de estar. Es estrecha. Supongo que la única fuente natural de luz que la habitación recibe es de la ventana en la parte trasera, que pasa a ser la cocina. Aunque con la mugre enmarcando el vidrio probablemente no es ningún beneficio. 

Harry se para al lado del sofá, la cabeza ligeramente inclinada y se ve fuera de lugar en su propia casa. 

"Se ve bien, Harry" digo amablemente. 

"No tienes por qué ser educada" se ríe débilmente. "Mi madre y mi hermana ni siquiera me visitan aquí, y no quiero que lo hagan. Sé que es un agujero de mierda. 

Tengo una pérdida de palabras así que me ocupo con mirar a mi alrededor. La tele es mucho más pequeña, no hay rastro de una consola de juegos y la lámpara de al lado necesita una bombilla nueva. Es cuando mis ojos se pierden en el prospecto del sofá y mi fisgoneo se detiene de manera embriagadora en el bate de béisbol apoyado en el brazo del sofá.  

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Sé que ha sido cortito, pero estoy liada con temas de la universidad, mañana subiré lo que queda<3 

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Knockout. (2º Temp. Dark. Español)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora