Capítulo tres

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Capítulo 03
Alexander


Paz Ramirez.

Ese es el nombre que está en mi celular cuando abro el chat con el Simón.

La mala suerte me persigue.

El Simón sigue escribiendo y me manda su contacto junto a otro mensaje más.

ella es la niña y ahí está el contacto
ojalá t sirva:)

Le doy las gracias al Simón y guardo mi celular para seguir caminando a la sala que me corresponda. Aprenderme las salas no ha sido tan complicado pero a veces aún me pierdo un poco.

—¿Qué chucha hací acá? — me dice una voz y no necesito darme vuelta para saber quién es.

Giro sobre mi eje y le entrego una sonrisa:—Hola, Sebastián — saludo —. Tanto tiempo.

Mi problema con el Sebastián es algo que se ha arrastrado con el paso de los años. En realidad él fue el que empezó a agarrarme mala cuando se metió con mi prima y ella después le dijo que no quería nada serio con él.

Y el hueón no sabe separar las cosas aparentemente y ahora le tiene odio a toda mi familia al parecer.

—Contesta la pregunta — exige.

—No te importa — contesto y sigo caminando.

Pero el Sebastián me empuja haciendo que yo empuje a una niña y me disculpo inmediatamente.

—¡Hey, que onda! — dice ella y sus ojos se dirigen a los míos y luego a los del Sebastián —. Ah, que lindo, Sebastián. Corta tu huebeo un rato y ándate a clase mejor.

—Emi, sabí si... — la Paz llega leyendo unas hojas, hasta que se encuentra con nosotros—. ¿Qué onda?

—El Sebastián me empujó y yo la pasé a llevar — explico.

La Paz suspira y luego nos mira a nosotros dos:—Sí sé quieren agarrar a combos háganlo, pero tengan cuidado con quién están a sus alrededores — mira al Sebastián —. Y tú Sebastián deja de hacer show por todo porque ya nos tení hartos a varios.

El Sebastián la mira con furia y luego me mira a mí antes de irse.

Me giro a las chiquillas y observo a la amiga de la Paz:—¿Estai bien? — pregunto.

—Sí, tranqui. No pasó nada — asiente.

Asiento y luego mis ojos van a los de la Paz, quién me mira con intensidad y cierta curiosidad.

Le entrego un sonrisa divertida:—Paz.

Ella hace lo mismo:—Alex.

Sus ojos permanecen en los míos un par de segundos más antes de que ambos sigamos para nuestras respectivas clases.


ੈ✩‧₊˚

Paz

—¿Qué fue eso? — susurra la Emi a mi oído.

—¿Qué cosa?

—Hueón, se miraron y hubieron chispitas — se emociona mi amiga, haciendo que una risa se escape de mi boca.

—Estai más loca — le digo —. Chispitas de odio salieron ahí.

—Nu-uh — dice mi amiga.

—Vamos a clases mejor — le digo.

—¡Te haces la loca porque sabes que es verdad! — exclama la Emi.

Yo niego:—No, el Alexander es de esos típicos minos que se creen mejor que otros...

—No — me interrumpe la Emi —, el Sebastián es así, pero al Alexander no lo conoces de verdad...

—Y tampoco tengo ganas de conocerlo — murmuro.

La Emi me entrega una mirada divertida y luego caminamos a la sala donde el profe ya se encuentra instalando sus cosas.

—Apostemos una promo de sushi — me susurra mi amiga mientras nos sentamos.

—¿Apostar pa' qué?

—Sí es que pasa algo entre ustedes — sonríe divertida.

—Vo' estai mal del mate — me río bajito.

—Delulu es la solulu — dice orgullosa.

Una pequeña risita se escapa de mis labios y luego me dedico a prestar atención, intentando no pensar en lo que dijo la Emi.

La hora pasa rápido y no es mucho lo que hacemos en clase, tomo algunos apuntes y luego la Emi y yo nos vamos a comprar un café al quiosco.

—Hoy la profe quiere que nos juntemos a hablar — le comento a mi amiga.

—Paz — toma mi mano —, todo será para bien — me asegura —, ya verás que el universo pondrá todo en su lugar y como corresponde.

Le entrego una sonrisa triste:—Tengo miedo — confieso —. Pero tengo miedo de lo que pueda hacer el Sebastián.

—Nada te pasará, Pazita — intenta tranquilizarme —, pero a él le va a llegar un golpe tan fuerte alguna vez y con eso va a aprender a ser humano.

—Espero que tengas razón, Emi.

Mi celular vibra y la pantalla se ilumina,  me acerco para ver la notificación, encontrándome con varios mensajes de un celular desconocido, y al leerlos se me detiene el  corazón por unos segundos.

hola paz
soy el alexander
sorry q te hable de la nada pero un amigo m dió tu número
quería ver si podríamos hablar
estoy buscando un grupo de cueca nuevo

Tomo mi celular entre mis manos para volver a leerlos.

—¿Estai bien? — pregunta la Emi.

Mi ojos se dirigen a los de ella y le muestro la pantalla de mi celular. Luego de unos segundos, sus ojos vuelven a los míos.

—El universo está poniendo todo en su lugar — repite.

—Claramente el universo no me quiere — murmuro.


ੈ✩‧₊˚

jelouuu, espero q disfruten!!
gracias por leer<3
pd: todos somos la emi HSHDJZJ

Bailemos un pie de cuecaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora