Jennie se encontraba harta de la situación a nivel nacional, con el país moviéndose todos los días para la preparación de la boda entre el Príncipe Seonghwa y su omega de alta categoría.
De alguna forma, el tema de Lisa y su rebelión fue a segundo plano para los monarcas y el parlamento. Con los preparativos de la boda y los gastos que implicaba, además, la milicia pasó los últimos días de buscar a la omega, a custodiar cada perímetro de la ciudad para que todo saliera según lo planeado.
Jennie sabía que la boda no tenía sólo un objetivo político, como era el consolidar la monarquía Min y asegurar la sucesión; por el contrario, poseía un objetivo también propagandístico y social, que era el mostrar el liderazgo de los Min como alfas hechos y derechos y, a un lado suyo, la omega siempre obedeciendo. Por lo que sabía Jennie, Soyeon era lo que se esperaba de una omega de alta alcurnia.
Aun así, esos preparativos le sacaban de quicio. Jennie se había acostumbrado el último tiempo a la persecución, al asedio, a buscar pistas para encontrar a Lisa, y ahora, verse relegada a la seguridad de una boda, era un poco... decepcionante y estresante, al menos para ella.
Soojin entró a su despacho, observándole con un poco de burla en la mirada al notarla molesta y ansiosa.
—¿Demasiado trabajo? —preguntó, sentándose en la silla frente al escritorio—. La verdad es que esto es aburrido. Hoy tuvimos un nuevo ensayo de cómo marchar cuando vayamos al frente de la comitiva. Y tú —señaló a Jen—, no estabas allí.
—No estaré en esa broma de mal gusto —masculló—, me debo encargar de la seguridad y fijarme en los puntos muertos. Como a Lalisa y su grupito se le ocurra...
—¿Estás loca? —Soojin lo descartó con un gesto despectivo—. Por muy rebelde que sea, no creo que también sea suicida. Además, es una simple omega, ¿crees que la cabeza le dé para algo tan arriesgado como eso?
Jennie frunció el ceño ligeramente. Cuando ella era una soldada de entrenamiento, fue cuando surgieron los primeros rumores de una omega rebelde en las periferias de la ciudad. Bueno, toda la milicia lo sabía, pues fue un asunto tremendo que involucró la muerte de la alfa de Lisa en manos de la omega. Los detalles nunca fueron importantes, pues la noticia principal era el hecho de que una muchacha, que estaba por llegar a la mayoría de edad y que, por sobre todo, fuera omega, asesinó a su alfa a sangre fría antes de huir. Así iniciaría la persecución por capturar a la joven, que pareció desaparecer de la fase de la tierra.
Unos meses después, comenzaron los avistamientos de la omega en torno a la enorme metrópoli. Lisa se convirtió en algo así como una pequeña ladronzuela, que se metía a casa de aristócratas y se robaba el dinero y las joyas, quién sabe para qué locura. De todas formas, era demasiado escurridiza y la policía jamás atinaba en alguna de sus trampas. Ahí fue que esas noticias llegaron a la milicia.
Si era honesta, Jennie tampoco le tomó el peso durante un tiempo, indiferente a una omega que pronto sería capturada. Sin embargo, los meses pasaban y pasaban, y los ataques de Lisa iban siendo más y más seguidos. El asunto escaló rápidamente cuando la chica asaltó un tren de carga, que llevaba un montón de ovejas, y las liberó a metros de la ciudad, luego de pintarles en el pelaje la palabra "LIBERTAD". En ese momento se decidió que los militares la capturarían al ver que la policía era inútil en sus intentos.
ESTÁS LEYENDO
Inopia | Jenlisa
RomanceLalisa Manoban es una omega rebelde. Jennie Kim la encargada de capturarla. ➼ Jennie G!P ➼ Adaptación © Hobibuba ➼ Prohibido copiar o adaptar mi versión