Al día siguiente, me desperté con la incertidumbre de qué estrategias emplearían los chicos
Salí de mi dormitorio hacia el Gran Comedor, donde noté que los cinco estaban presentes. Cada uno buscaba la manera de acercarse y proponerme un plan para pasar el día. Eranrisas cómplices y miradas desafiantes se cruzaban entre ellos. La competencia estaba por comenzar
Draco sugirió un paseo por el lago, Regulus propuso algo similar, y los demás esperaban su turno con ideas más o menos parecidas. Mantuve mi poker face, sin revelar mis pensamientos, mientras Lorenzo observaba expectante.
Después de las propuestas iniciales, llegó el turno de Tom. —¿Qué te parecería una visita a la Sala de los Menesteres? Podemos hacer algo especial allí. —dijo, con un brillo intrigante en sus ojos.
Mattheo añadió con una sonrisa traviesa —Tal vez podríamos encontrar algo que ni siquiera sabemos que queremos.
Blaise y Lorenzo también hicieron sus sugerencias, dejándome con la tarea de elegir. Mientras todos esperaban mi respuesta, mantuve la intriga para mantener la competencia en marcha.
Pero por un momento. La ausencia de Theodore me desconcertaba.
Recordando nuestra conexión especial en el bosque prohibido, me preguntaba si, de alguna manera, se había enterado de la apuesta entre los otros chicos
Después de pensar un poco decidí aceptar la primera cita con Mattheo, ansiosa por descubrir qué tenía planeado y si realmente estaba dispuesto a competir por ganar esta extraña apuesta.
Caminé hacia la cita con Mattheo, preguntándome qué ideas tendría para sorprenderme
Fue entonces cuando Theodore apareció en el pasillo, y aunque no formaba parte de la apuesta, algo en su mirada sugería que tenía algo en mente.
Theodore me detuvo con una sonrisa intrigante y preguntó hacia dónde me dirigía.
—Voy a encontrarme con Mattheo. —respondí, sin revelar demasiado.
—Ah, Mattheo... —dijo Theo, con un tono reflexivo—. Cuidado con eso Grindelwald
Su comentario dejó un rastro de intriga, pero no profundizó más. Continué hacia la cita con Mattheo, con la sensación de que Theodore sabía algo que yo aún no descubría.
Me dirigí al campo de Quidditch, donde Mattheo se encontraba en entrenamiento. Con un gesto sutil, llamé su atención, y cuando se aproximó, le dije con una sonrisa: —Decidí aceptar tu propuesta, Mattheo. La primera cita es tuya.
Nos encontrábamos bajo un árbol, al lado del lago. Pero Mattheo no había dicho ni una palabra desde que llegamos, simplemente respondía mis cuestionamientos.
Entonces lo mire a los ojos y pregunté:—¿Esta todo bien?
El me miro directamente, podría decirse que es la mirada más dulce que jamás había visto. Y se acercó miro entre mi boca y mis ojos y después ambos chocamos nuestros labios, el uno con el otro, como si necesitáramos eso más que otra cosa en el mundo. El tomo mi cintura y me acercó a él.
Los besos de Mattheo era algo que jamás había experimentado, eran apasionados, fuertes, como si fuese insaciable su sed de comerme la boca.
Entonces me detuve y sonreí
—¿que pasa?— me pregunto
—Nada, es solo que...
—¿fue muy intenso el beso?— se acercó para depositar un beso corto en mis labios haciéndome sonreír
En mi mente, vi a Mattheo el chico malo, más deseado y uno de los más guapos besándome, no podía decir que era algo imposible de lograr pero si bastante difícil.
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El juego (Slytherin Boys)
FanfictionDraco Malfoy, Tom Riddle, Mattheo Riddle, Theodore Nott, Lorenzo Beckshire, Blaise Zabini y Regulus Black le jugaran una inocente apuesta a t/n, pero ¿ella se quedará de brazos cruzados?