La madrastra II | Ross Lynch

Capítulo 24.

Penúltimo Capítulo.

Dedicado a: @Magiee14

Despertó con la respiración totalmente agitada, sus ojos miraron todo lo que tenía alrededor y me miro a mí, estaba asustada, podía notarlo. Sus manos temblaban ligeramente.

-Tranquila, amor...
Susurre acariciando su mano como antes.

Lágrimas se asomaron por sus ojos.
Antes de que pudiera liberar el primer sollozo la abrace, apegandola a mi pecho.

-R... Ross...
Susurro con la voz rota.

-Tranquila cariño... ya paso... él pagara por todo lo que hizo... no volverá a molestarnos -Tome su rostro entre mis manos, mirándole cada detalle de su bello rostro.

-Me... me violaron...

Susurro para luego dar un enorme grito desgarrador. La volví a abrazar. Tenía unas inmensas ganas de llorar, no me sentía bien con el hecho de haber podido salvarla y no haber podido hacerlo.

-Todo estará bien... Jo se pudrirá en la cárcel -Besé su cabeza-. Lamento tanto que hayas tenido que pasar esto por mi culpa... no sabes cuanto lo lamento...

Un sollozo se escapó de sus labios.
Se separó de mi con extrema suavidad y me miro a los ojos.

-No tienes nada que lamentar... -Suspiro, aún con lágrimas en las mejillas-. Siempre creí que Jo era incapaz de hacerme daño... pero... lo hizo... espero poder superar esto rápido...

Cerró los ojos y con sus manos los tapo.
Me senté al lado de ella y volví a apegarla a mi pecho. La amaba.

Y no volvería a permitir que ningún idiota como Jo le vuelva a poner un dedo encima... ella es mía, mía y de nadie más, solo mía.

Es mi princesa y yo me encargaré de protegerla aunque me cueste la vida...

-No llores -Susurre-. Entiendo que estas nerviosa y dolida... pero no quiero verte llorar princesa...

Levanto su mirada hacia mí, rozando nuestros labios intencionalmente.
Tome su mentón y decidí besarla, pude notar como se iba tensando.

-Tranquila -Besé su mentón-. _______, tu sabes lo estúpidamente que estoy enamorado de ti, sería incapaz de hacerte daño o aprovecharme de ti fuera de tu concentimiento... me tienes en la palma de tu mano nena... no tienes ni la menor idea de cuanto te amo cariño.

Le deje un pequeño beso en los labios, ella iba a responder pero el doctor entro a la habitación sonriente.

Me levanté de la cama para que _______ pudiera acomodarse mejor allí.

-Veo que ya despertaste _______ -Comento sonriente, ella solo asintió jugando con sus manos nerviosamente, le deje un beso en la frente-. ¿Cómo de sientes?

-Tengo miedo y estoy algo... confundida

-Es normal que te sientas confundida por un tiempo, y no debes de sentir miedo, el ya está en la cárcel, no volverá a hacerte daño -Hizo una pausa-. Podes darte un baño, si queres, dentro de un rato te servirán el desayuno y comenzaremos con la primera terapia.

Dijo para luego retirarse.
________ me miro con los ojos abiertos como platos.

-¿Terapia?

-Es para que superes lo que... lo que te paso, solo tendrás 5 terapias... al menos eso creo.

Besé nuevamente su frente y baje para besar sus labios.

Hay fue cuando recordé que tenía que decirle algo realmente importante, ya que ella también estaba involucrada. No creo que se lo tome a mal... eso espero...

-Nena... tengo que decirte algo.

Frunció el ceño y me miro con los brazos cruzados, se acomodó en la cama.

-¿Qué cosa? No me asustes...

-Adopte a Abigail.

Abrió los ojos como platos.
Estaba rogando porque no se arrepintiera... no quería tener problemas por ahora...

-¿¡Qué!?
Exclamo llevándose las manos a la cabeza.

-________... se que los padres de Abigail se la llevaron pero... eh... La vi aquí, en la cafetería, su madre me contó que el padre de Abigail había muerto, no se por que, y Su madre tenía cáncer terminal... y se lo había enterado hace unos días.

________ miro el techo y suspiro.
Miro su cuerpo, sus brazos tenían unos moretones muy pequeños, y algunas partes de su cuerpo estaban heridas.

-Ross... debiste haberme consultado...

-¡Joder, estabas inconsciente! ¿Y si la madre de Abigail se moría hoy? La dejaría sola... Abigail es una niña completamente inocente, necesita en amor de unos padres...

-Pero nosotros no somos sus padres Ross... ni siquiera sabemos su apellido...

-Abigail Harrinson.

Respondí cruzándome de brazos.
¿En verdad no quería a Abigail?
Tal vez no debí decirselo, simplemente debí haber esperado a que pase esto este asunto.

-Ross... no es que no quiera a Abigail, pero... no lo se... ¿no crees que es mejor que tengamos bebés?

Asentí.
Pero ya no había marcha atrás.
Ya lo había hecho.
Ya no podía devolver a Abigail como si nada...

-Abigail puede tener hermanitos... o hermanitas -Susurre acariciando su mejilla-. Se encariñó mucho con nosotros desde que se perdió, por favor _______... ayúdame en esto...

-Con una condición.

La mire alzando una ceja.
¿Una condición?
Me senté a su lado, observe sus labios, la herida ya estaba muy pequeña por suerte.

-¿Cuál?

-Si es que tenemos hijos o hijas me dejarás elegir el nombre, por lo menos del primero.

Sonreí agradecido.
Me acerque a ella y bese sus labios profundamente, apoderándome de sus deliciosos labios. Besé su comisura y me separé.

-¿Seremos una familia entonces?
Pregunto ella sonriendo.

-Una familia muy feliz, cariño, me encargare de que sea así, lo prometo.