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─Tu crush está aquí. ─ Jimin le da un golpecito en el hombro a Jennie y ella se levanta sobresaltada, repentinamente despierta.

─ ¿Qué? ─ se frota los ojos y ve a un Jimin sonriente que se cierne sobre ella en la sala de guardia.

─Rosé está aquí.

─ ¿Eh? ¿Por qué?

─ ¿Por qué iba a saberlo? Me reconoció y me preguntó si sabía dónde estabas. ─ Se encoge de hombros, antes de ayudarla a levantarse.

─ ¿Rosie?

─Sí, Jennie. Rosé.

Por fin se despierta del todo. ¿Rosé está aquí?

─ ¿Por qué?

─Acabo de decírtelo... no lo sé, ─ se ríe él, sacudiendo la cabeza cuando ella lo mira confundida. ─Está en la estación de enfermeras.

─Huh. De acuerdo. ─ Se frota los ojos nuevamente, antes de levantarse por fin de la incómoda camilla.

Se pone la bata de quirófano y las gafas, el pelo recogido en el habitual moño que lleva.

Luego, se abre paso por los pasillos y encuentra a Rosé sentada en una silla, esperando pacientemente.

Tiene el teléfono en la mano, la barbilla apoyada en la otra y las piernas estiradas, con los tobillos cruzados.

Es lo contrario de Lisa y a Jennie le encanta.

No puede evitar la sonrisa que se le dibuja en los labios cuando observa en silencio como Rosé resopla un par de veces, antes de pasarse una mano por el pelo para apartárselo de la cara.

La mujer es tan impresionante a su manera, que a Jennie de repente le cuesta respirar.

Pero, juntando fuerzas, finalmente se acerca y su sonrisa no hace más que crecer cuando Rosé se fija en ella y se levanta de la silla con soltura, guardando su teléfono en el bolsillo del pantalón que originalmente pertenece a... Lisa.

─ Hey, ¿qué estás haciendo aquí? ─ Jennie sonríe cuando Rosé se acerca a abrazarla.

─Sólo quería comprobar cómo estabas. Me preguntaba cómo le iba a mi mayor fan en su extravagante trabajo como cirujana. ─ Rosé suelta una risita y sus oscuros ojos brillan.

Jennie resopla y mueve la cabeza divertida. ─Sólo soy una residente, Rosé.

─Pero vas camino a convertirte en una cirujana independiente y eso es impresionante. No lo olvides. ─ Rosé vuelve a sonreír y Jennie olvida donde está cuando la mujer le guiña un ojo. ─En fin, es hora de cenar. Lisa está atrapada en la oficina y esperaba que tuvieras algo de tiempo para estar conmigo.

─ ¿Me estás utilizando? ¿Como reemplazo de Lisa? ─ Jennie molesta a su amiga y disimula una sonrisa cuando Rosé asiente.

─Uhm, mi turno termina en veinte minutos.

─Puedo esperar. ─ Rosé le sonríe dulcemente, haciendo que Jennie se derrita un poco por dentro.

La sonrisa de Rosé es... contagiosa. Es brillante, amplia y la hace aún más hermosa.

Jennie se traga sus sentimientos, recordándose a sí misma que tiene novio y que Rosé y Lisa están felizmente casadas.

Lo que le recuerda a Minho. ¿Cómo pudo olvidarse de su novio?

─ ¿Estás segura? ─ Jennie considera que quiere pasar más tiempo con Rosé que con Minho lo cual es una señal.

Sabe lo que debe hacer, pero aparta el pensamiento porque Rosé está aquí esperándola.

Always | JENLICHAENGDonde viven las historias. Descúbrelo ahora