¿El señor Lee sabrá que el maestro Donghyuck tiene un pequeño enamoramiento con él? O en donde Donghyuck le da clases al pequeño hijo de Mark.
╔══════❀・°・❀══════╗
⛧La obra no es de mi autoría,
...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Donghyuck fue el primero en despertar gracias a que sentía que le picaban la cara con un dedo.
Frunció el entrecejo por la luz del sol. Abrió los ojos lentamente encontrándose con los ojos curiosos de su alumnito y entonces recordó que no estaba en su casa.
— ¿Qué es un condón? — preguntó Minho.
Donghyuck no supo que contestar, ¿de dónde había sacado uno?
Mark despertó confundido ¿qué hacía Harry en su cama?
Y aún más importante para Minho ¿qué era ese globito grasoso?
Mark miró el condón, - que anteriormente Minho había abierto - miró a Donghyuck y nuevamente al condón usado.
Miró que no tenía ropa más que sus bóxers y que su vestimenta estaba por todo el suelo.
— ¡Oh, mierda! — habló horrorizado.
Minho dio un brinquito hacia atrás por el repentino grito de su padre y Donghyuck se levantó palpando sus bolsillos del pantalón y encontrando varios condones.
«Jodido Renjun» sin duda mataría al chino cuando lo tuyiera de frente.
— Minho, amor. Sal de la habitación en lo que yo hablo con tu papi ¿puedes hacer eso por mí? — pidió Mark, Minho asintió saliendo de la habitación y cerrando la puerta.
— ¿Qué demonios haces en mi casa? Más bien ¿qué haces en mi cama y por qué tienes condones y por qué hay uno en el piso?
— Los condones no son míos, técnicamente. Un amigo me los echó sin que me diera cuenta por si pasaba algo en mi cita... — murmuró lo último — Y por casualidad nos encontramos en ese lugar y tú estabas muy ebrio y te traje a tu casa pero tú no querías que me fuera y yo sólo iba a esperar a que te durmieras para que y me fuera pero insististe tanto que me quedé y me dormí sin querer. Pero te juro, Dios, te juro que no sucedió nada — habló rápido tratando de explicarse.
— ¿Nada de nada?
«Quitando el hecho que me besaste y me dijiste que te gusto...»
— Nada de nada.
Mark soltó un suspiro de alivio, al menos aún seguía siendo virgen. Pequeños fragmnentos de la noche anterior llegarona su mente comprobando que Donghyuck no mentía.
Hasta que recordó vagamente haber besado a alguien y decirle que le gustaba pero no recordaba a quien.
— ¿Sólo eso pasó?
Donghyuck se sonrojó ligeramente y asintió apartando la vista y mordiéndose el labio inferior por el nerviosismo.
