Narración.
El camino de regreso parecía estirarse hasta el infinito, pero al menos, Naruto ya no tenía que caminar. Sentado en las piernas de su hermana, parecía estar en su propio mundo, absorbido por las historias que su abuelo le contaba sobre la infancia de Kiyomi. En la carreta, junto a ellos, estaban también Kurenai y el abuelo, mientras Gai se encargaban de llevarla adelante, y Asuma y Kakashi flanqueaban la carreta, vigilantes y protectores.
—¿Y qué más hizo? —preguntaba Naruto, sus ojos brillando de emoción ante cada nueva anécdota.
Kiyomi se sentía avergonzada por las travesuras de su infancia, y prefería que quedaran en el olvido, pero Kurenai estaba intrigada y su abuelo no parecía tener reparos en compartir.
—No creo que sea necesario que sepas eso —murmuró Kiyomi, su rostro ardiendo de vergüenza.
—Yo también quiero saber las travesuras de la pequeña Kiyomi —agregó Kurenai, sonriendo con curiosidad.
Kiyomi sintió cómo su rostro se volvía aún más rojo ante la perspectiva de ser expuesta de esa manera.
—Bueno, Kiyomi se enteró de que su compañero de clase la delató con el maestro, así que después de clases lo esperó en la salida y se abalanzó sobre el pequeño mocoso para darle una buena golpiza —concluyó el abuelo, riendo con ganas.
Kiyomi observó en silencio el ambiente animado que se había generado gracias a las historias de su abuelo y las travesuras de su infancia. Mientras todos reían y compartían recuerdos, ella también rememoraba en silencio esos momentos, recordando las travesuras con Kushina, las bromas a su familia y las dulces reprimendas de su madre. Añoraba esos momentos de complicidad y amor familiar que ahora parecían tan lejanos.
Sus pensamientos fueron interrumpidos abruptamente por el repentino freno de la carreta y el cambio repentino en el ambiente. Kakashi y Asuma sacaron rápidamente sus kunais, adoptando una postura defensiva mientras escudriñaban el bosque circundante con expresiones tensas y alertas, como si estuvieran buscando algo o alguien que se escondiera entre los árboles. El silencio tenso que se había instalado en el grupo contrastaba fuertemente con la alegría anterior, y Kiyomi sintió cómo la preocupación se apoderaba de su corazón, preguntándose qué podía estar acechando en las sombras del bosque.
— ¿Qué pasa? —preguntó Kiyomi, desconcertada, mientras dirigía una mirada inquieta a Kurenai, quien también se preparaba para la defensa con un kunai en mano.
— Unos chakras se acercan a gran velocidad hacia nuestra posición —respondió Kakashi con seriedad, sin moverse de su postura defensiva.
Un escalofrío recorrió el cuerpo de Kiyomi al escuchar esas palabras, y su corazón latió con fuerza, temiendo por lo que pudiera ocurrir en los próximos momentos. Instintivamente, abrazó con fuerza a Naruto contra su pecho, tratando de protegerlo y ocultarlo lo más posible. Sintió cómo el niño temblaba de miedo bajo sus brazos.
— Naruto... no te preocupes, nada nos pasará —susurró Kiyomi cerca de su oreja, acariciando su espalda en un intento de tranquilizarlo—. Recuerda que Kurenai nos está protegiendo, y nosotras no dejaremos que nada te pase...
Naruto asintió en silencio, escondiendo su pequeña cabeza entre los brazos reconfortantes de Kiyomi.
—Gai, prepárate para correr hacia la aldea más cercana. —ordenó Asuma, su voz firme y decidida.
Gai asintió en silencio, listo para actuar en cualquier momento.
Durante unos minutos que parecieron eternos, nadie se movió, sumidos en un tenso silencio que fue interrumpido por el sonido del movimiento en los arbustos. De repente, shurikens salieron disparados desde las sombras, algunos quedaron atrapados en la carreta mientras que otros fueron detenidos por los rápidos reflejos de Kurenai, quien saltó de la carreta para posicionarse al lado de Asuma. Pronto, un grupo de ninjas emergió de entre los árboles, rodeándolos por completo.
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𝗄𝗈𝗂 𝗇𝗈 𝗒𝗈𝗄𝖺𝗇 ⸝⸝恋の予感 KAKASHI x OC
Fanfiction❝𝘌𝘴𝘦 𝘴𝘦𝘯𝘵𝘪𝘮𝘪𝘦𝘯𝘵𝘰 𝘲𝘶𝘦 𝘵𝘪𝘦𝘯𝘦𝘴 𝘤𝘶𝘢𝘯𝘥𝘰 𝘤𝘰𝘯𝘰𝘤𝘦𝘴 𝘢 𝘢𝘭𝘨𝘶𝘪𝘦𝘯 𝘺 𝘴𝘢𝘣𝘦𝘴 𝘲𝘶𝘦 𝘵𝘦 𝘷𝘢𝘴 𝘢 𝘦𝘯𝘢𝘮𝘰𝘳𝘢𝘳 𝘱𝘦𝘳𝘥𝘪𝘥𝘢 𝘦 𝘪𝘳𝘳𝘦𝘮𝘦𝘥𝘪𝘢𝘣𝘭𝘦𝘮𝘦𝘯𝘵𝘦 𝘥𝘦 𝘦𝘴𝘢 𝘱𝘦𝘳𝘴𝘰𝘯𝘢.❞ En este fanfic, K...