¿Amor o amistad?

Capitulo 6: visitas.

Al llegar mamá puso las flores y el jarro en un mueble que había a un lado de la camilla y se sentó. Vi a Matt y comencé a llorar. Mamá me vio y se paró a abrazarme. 
-En verdad te gustaba, ¿no? Apenas dijo eso salté y me puse rojísimo. Ella soltó una risita y continuó hablando.
—Se te notaba, William, ¿Acaso crees que no me había dado cuenta? No seas tonto, siempre te veías feliz con él. Tú sabes que no sé mucho de ese tema, pero te apoyaré.
-¿Q-que? , ¡¿queee?! … ¡M-mamá!, ¡n-no me gusta! …osea, ¿quizás sí?, ¡no me enredes!—Le dije y voltee a ver a Matt. Se veía tan lindo, que no pude evitar comenzar a llorar. —Quizás sí me gusta, pero soy demasiado homofóbico, pero por él… ¡No!, no me gusta… ¡Ya no puedo más! …¡Me encanta!—dijo mi mente rápidamente y luego reemplazó el pensamiento por yo y Matt tomados de la mano en una banca mirando el atardecer. Muy romántico para mí. Luego de pensar tanta porquería romántica seguí mirando a Matt. Después de un rato llegó Adina y yo y mamá nos fuimos. Al llegar a casa fui a mi pieza rápidamente y dejé en un cofre pequeño que tengo guardada la manga que me dio Matt.
Al día siguiente fui a visitar a Matt luego de firmar unas cosas en la universidad. Hable un rato con él, espero que me esté escuchando…
-Oye Matt... Me gustas, ¿sabes? La primera vez que te vi sentado en ese parque me enamoré completamente de ti. No creo en el amor a primera vista, pero creo que tú cambiaste mi forma de pensar. Ya va a pasar casi un año de amigos contigo. Y el tiempo ha pasado volando. Cuando supe que estabas acá vine corriendo y al verte fue horrible. Espero que despiertes y cumplas mi sueño de estar juntos. Es tonto, y no creo que me vea de la misma forma, pero aun así me encantaría. Si te gusta podríamos ir a ver Sonic a mi casa, ya sabes… cosas románticas. No paro de pensar en tus ojos y en tus pinturas. Y no puedo evitar reirme al recordar a esa vieja loca de mi vecina cuando ayudamos a su hijo. Al principio te vi cara de gay, lo siento por eso, pero si no lo eres, está bien, lo entenderé. Conozco a tu hermana. Nunca te lo dije ya que quizá sería un tema incómodo para ti. No quiero que estés así para siempre, pero si así estás te seguiré viendo por siempre, te lo juro… Luego de eso tomé mis cosas y me fui. Apenas salí del hospital comencé a llorar y saqué un cigarrillo y comencé a fumar, pero recordé a Matt y sus retos y charlas de lo que hacía la droga y el cigarro con uno. Así que lo apagué y me fui a casa. Al llegar no había nadie, pero había una nota.
—"Estoy en el trabajo, hoy es turno hasta tarde, hay comida en el horno. Cuidate, te amo.
Luego dejé la nota de lado y comencé a revisar unas notas que me habían dejado unos niños en mi ensayo de profesor en práctica. Nunca lo había dicho, pero estudió para ser profesor. Una vez Matt me dijo que estudiaría para ser profesor de artes. Me encantaría que trabajemos en una misma escuela y que nos hagan dibujos de romance secreto. Sería gracioso, pero estupido. Ojalá de adulto me case con él y adoptemos una niña. Como no puedo parir niños ni tenerlos por la boca, sería adopción. Cuando le pida matrimonio lo haría en un museo de arte con la mejor pintura de Leonardo da Vinci, cualquier cuadro menos el de la Mona Lisa, me perturba su mirada, creo que el mejor cuadro de Leonardo es Sala Delle Asse, me causa algo extraño…, bueno, pero creo que ya he pensado mucho en arte, iré a tomar una siesta.
Al despertarme vi el teléfono y tenía un mensaje de Adina el cual pedía que nos juntáramos en un parque que estaba cerca. Me visto y salgo. Al llegar la vi sentada y fui a saludarla. Al verme me sonrió y me sentó a su lado. Me agarró de la mano y me miró a los ojos, pero apartó la vista y solté su mano. La vi de reojo y se notaba triste mirando mi mano. Comenzó a llorar y apoyó su cabeza en mi hombro, la deje y la console. Después de un rato comenzamos a hablar de cómo había conocido a Matt y su vida con él.
—Siempre fue un chico muy callado…, nunca expresó sus sentimientos. Nuestros padres nunca lo quisieron, más cuando salió del closet, mi madre le dio una cachetada y mi padre lo golpeó hasta dejarlo en el hospital. Siempre trato de estar junto a él. Éramos inseparables, nos queríamos mucho. Una vez en la mañana bajé a la cocina y lo vi cortarse los brazos. Grité y mis padres se levantaron y lo golpearon porque según ellos solo quería llamar la atención. Yo era la favorita, pero a él jamás le afectó eso y me quería igual. Pasaron los días y fui a verlo a su habitación y estaba empacando sus cosas, me miró y dijo que se iría para continuar sus estudios en un lugar mejor. Recuerdo que levanté a mis padres y comenzaron a discutir, papá y mamá le dijeron que era inútil y que jamás sería nada en la vida sin ellos. Les grité que pararan de decir eso y mi madre me agarró y me llevó a un cuarto y cerró con llave. Cuando me sacó mi hermano se había ido. Al enterarme de eso comencé a gritar y a llorar…- Cuando terminó de hablar la abracé.