Porfavor, hacelo.

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Narra Agustina

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Narra Agustina.

Al día siguiente, Enzo vino a visitarme, como era costumbre.

- ¿Podemos hablar? - pregunto Enzo.
- Decime, amor.
- Ayer fui a lo de Mati y me contó todo lo que le dijiste ayer.
Me quede en silencio y un poco en shock, trague saliva y lo mire fijo.
- Perdóname por mis actitudes. La verdad que esto es shockeante, nunca pensé que te podía pasar algo así, no se como actuar aveces. Me gana la ira de no haberte podido salvar, y aún que no es mi culpa, de algún modo, duele. Me pone mal verte en una cama por un hijo de puta, con cables y siendo controlada. Estas deprimida, amor, ese loquito te arruino. 2 días y 2 noches sin saber una palabra de vos, buscándote que todos lados, la posibilidad de q no estés más conmigo, la desesperación que sentíamos todos...fue todo muy rápido y duro. - me agarro la mano, suavemente. - Vos no tenes la culpa, amor, y no estoy enojado, para nada. Me parece absurdo que pienses que te puedo cambiar por una que no tenga que esta en una camilla, o que no te amo más. Amor, te amo más de lo que alguna vez logré amar. No me gusta que pienses eso, yo desde que me enamoré de vos me propuse hacer todo lo que pueda hacer para que no te pase nunca nada, y esto fue impensable. Yo te amo muchísimo, Agus, muchísimo. Me podrías haber dicho que te sentías así, te podría haber explicado. Vida, se que parece que yo soy el frío que actúa romántico y te coje, pero nada que ver. Te quiero cuidar, te quiero conmigo siempre, te quiero tener, casarme con vos, vivir miles de aventuras con vos, millones de cosas.
Me largue a llorar y nos besamos, realmente, fue muy tierno, fue un gran consuelo.
Una semana después, salí del hospital para casa.

Narrador omnisciente.

Agus y Enzo se dirigían a lo de Mati, iban a hacer una juntada ellos 2, Mati y Mili. Los de siempre.

- Estúpido. - gritaba Mili. - Servi se algo, la puta madre.
- Bajame los humos a mi. - contestó Mati, levantando un vaso roto del piso. Lo dejo en la mesada.
- Pero te das cuenta que sos un boludo, dios, me encantaría matarte.
Mati se dio vuelta y acorralo a Mili contra la pared.
- ¿Posta? - susurro el chico, con esa típica cara de malo, como si actuará de Danilo. Mili trago saliva y lo miraba a los ojos, de vez en cuando, bajaba a los labios.
- Sali, tonto. - lo empujó y Mati se empezó a reír. - Dale, que tenemos que terminar de hacer esta mierda.
Hicieron una torta, hubo guerra de harina, se golpeaban con la espátula, etc.
- Mati. - dijo Mili.
- ¿Mhm?
- ¡Pensá rapido, cuernudo! - agarro un puñado de harina y cuando Mati levanto la mirada, se lo tiro a la cara.
- La concha de tu vieja...cagaste ahora. - se tiraban el paquete o puñados, mientras se reían.
Mili, hace bastante, era una fiel enamorada de Mati. Agus ya sabía, así que trataba de unirlos. Pero a Mili, no se le daba muy bien eso de coquetear.

Por otro lado, Enzo y Agus iban de la mano en el auto, mientras cantaban YSY A.

- LA VECINA MIRA DESDE SU VENTANA PORQUE TAMO LOCO. - gritaba Agus.
- Amor, baja, que te vas a desmayar.
- AGUANTE EL GORDO YSY AAAAAAAAA.

2 palabras, 5 letras.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora