Es solo una película, ¿verdad? ( Fang x Max ) [ Brawl Stars ]

• Capítulo 14: La cita (2/2)

Parte 2

Max estaba más que emocionada. La adrenalina de la montaña rusa la hizo sentir una energía tan especial que apenas podía contenerse. Con los ojos brillando de emoción, estaba decidida a probar cada atracción que el parque tenía para ofrecer.

Juntos, llegaron a la fuente principal, se detuvieron por un momento para observar a lo lejos las diversas atracciones. El sonido de las risas y los gritos de emoción llenaba el aire, creando una atmósfera electrificante. Max se sentía como si estuviera en un mundo de fantasía, lista para sumergirse en cada experiencia que se presentara.

Max: ¡Fang, qué tal si vamos a los autos chocones? -mencionó totalmente animada, señalando el lugar con entusiasmo.

Fang: ¡Me encanta la idea, vamos! -respondió con el mismo entusiasmo.

Emocionados, Max y Fang se dirigieron hacia los autos chocones, atravesando el bullicio del parque con paso ligero y corazones palpitantes. A medida que se acercaban a la atracción, el zumbido de la electricidad en el aire se hizo más intenso, anunciando la emoción que les aguardaba.

Al llegar a la fila de espera, Max y Fang se unieron a la multitud ansiosa de aventureros que aguardaban su turno. La excitación era palpable en el ambiente, con risas nerviosas y murmullos de anticipación que llenaban el aire. Max se balanceaba de un lado a otro, apenas pudiendo contener la emoción que la inundaba por completo.

Finalmente, llegó su turno. Max y Fang se acomodaron en uno de los autos, aferrándose con emoción a los volantes mientras esperaban la señal para comenzar. El corazón de Max latía con fuerza, el nerviosismo y la emoción entrelazados en una danza frenética dentro de su pecho.

Con un chirrido metálico, los autos chocones se pusieron en marcha, deslizándose por la pista con un traqueteo emocionante. Con un grito de alegría, Max pisó el acelerador y se lanzó a toda velocidad, embistiéndose contra los otros autos con una risa. Fang no se quedó atrás, chocando y esquivando con habilidad mientras se reía a carcajadas.

Max: ¡Mira esto! -exclamó, su voz perdida en el rugido del motor mientras aceleraba y ejecutaba un derrape casi perfecto, provocando que Fang estallara en aplausos.

La emoción fluía entre ellos, alimentando su espíritu competitivo y su vínculo de camaradería en esta carrera desenfrenada.

Fang: Eso estuvo increíble, ¿qué te parece esto? -contagiado por la emoción, tomó la delantera.

Acelerando con determinación y girando el volante con precisión milimétrica, dando vueltas hábiles hasta detenerse justo frente al auto de Max. La mirada desafiante en sus ojos hablaba de la competencia amistosa que los unía, cada uno empujándose al límite en busca de la victoria y la emoción del momento.

Max y Fang se sumergieron por completo en la diversión de los autos chocones, olvidándose de todo lo demás y dejándose llevar por la emoción del momento. Era como si el tiempo se hubiera detenido, y solo existieran ellos, los autos y la pura euforia de la diversión.

Después de varios minutos que parecieron volar en un abrir y cerrar de ojos, los autos chocones se detuvieron, dejando a Max y Fang jadeantes pero radiantes de alegría. Se miraron el uno al otro, con las mejillas sonrojadas y las sonrisas aún más amplias en sus rostros.

Max, con la voz llena de emoción, rompió el breve silencio que siguió al frenesí de la diversión.

Max: Fue la mejor experiencia, ¡wuhhhh! -exclamó, la adrenalina aún palpable en su voz, mientras sus ojos brillaban con la pura felicidad del momento.

Fang, con una chispa traviesa en sus ojos, asintió con una sonrisa cómplice.

Fang: Fue emocionante! -coincidió, su voz resonando con la misma emoción-. Pero ¿qué tal si descansamos un poco? Quiero tomar algo.