Izuku, El Cuervo De La Muerte

El Niño

Hace 60 años, en la ciudad de QinQin, China, nació un niño con la habilidad de brillar, y después de él, miles y millones de personas empezaron a manifestar dones parecidos.

Poco a poco, esos dones paranormales se convirtieron en la normalidad del mundo, y ahora más del 60% de la población global tiene una habilidad especial.

Pero en este mundo de caos y desorden, hubo personas que quisieron usar sus dones para el mal: villanos.

Y entre todos ellos, no hubo uno más ruin y terrible que aquel conocido como All For One, un hombre cuyo único objetivo era tener el control sobre todas las personas.

Creó un imperio del crimen y mataba cruelmente a cualquier persona que se opusiera a él.

Pero no logró todo esto solo; tenía poderosos subordinados que le servían fielmente, y entre ellos estaba un hombre conocido como el Doctor Garaki.

A la vista de todos, no era más que un doctor amable y reconocido por sus avances en la investigación de dones.

Pero en realidad, no era más que un científico loco que usaba a las personas como conejillos de indias para sus experimentos dementes.

Fue gracias a él que nuestra historia tiene un comienzo; sin saberlo, le daría paso a la historia de un niño pequeño.

Inocente y valiente era lo que lo describía, sin embargo, tras el despertar de su don, su vida se volvió un infierno, y gracias a eso, en un futuro se convertiría en un símbolo.

No de paz, ni de esperanza, tampoco de justicia o algo parecido, sino de algo mucho más profundo.

Un símbolo de cambio, de revolución.

Y su historia comenzó justo el día que tuvo que ir con el Doctor Garaki cuando tan solo tenía 4 años.

...

-Tienes un don realmente interesante, niño -dijo el Doctor Garaki.

Frente a él había dos personas, ambos peliverdes: una mujer de unos 27 años y un niño de apenas 4.

-Es la primera vez que veo uno así.

-¡Ohhhh! ¿Entonces tengo el don de un héroe?

-Bueno, no lo diría de esa forma, pero estoy seguro de que lograrás grandes cosas con este don -concluyó-. ¿Ya sabes qué nombre ponerle?

-Pues... -el niño dudó un segundo, pero rápidamente siguió hablando-. Estuve investigando un poco, así que decidí llamarlo "Odin's Ravens", los cuervos de Odín.

-Ya veo, ya veo. Es un nombre poderoso: Hugin y Munin, los cuervos que iban por todo el mundo recaudando información para Odín -el doctor se acomodó las gafas y luego se levantó, extendiendo la mano-. Fue un placer, señorita Midoriya.

-Oh, no, el placer fue mío, doctor -respondió con una sonrisa-. ¿Qué se dice, Izuku?

-¡Muchas gracias, doctor!