los Demonios también Tienen Almas Gemelas

capitulo cuarenta y cinco

Nunca tuve inocencia, o no me dejaron conservar esa parte mucho tiempo, me hubiera gustado disfrutar mi inocencia un poco más, me hubiera gustado experimentar esa sanción de tener una buena relación con tus padres, pequeñas charlas, viajes familiares, y si no pude tener eso al menos sentir que mi madre me amaría a pesar de todo.

— ¿Recibiste la foto? — 

—Sí —. 

—Te amo mucho — suelto de la nada con un suspiro.

_ Daemon...— 

—Dime —. 

— He estado pensando mucho, sabes, me ha llegado a sentir triste de alguna forma, no sé por qué, a veces, me quedo en silencio mirando a la nada...—

— Sé lo que significa ese sentimiento, es tristeza y soledad...— 

— ¿Tristeza y soledad? —

— sí, no tengas miedo de estar sola... Nunca te soltaré de mi lado, Nina... Eres lo que más deseo —

Mi mirada puesta sobre las finas sábanas donde está la hermosa rubia de un gran trasero dormida, lo único que lleva encima es la sábana turquesa que cubre la mitad, de hombros.

—Debes estar cansada, duerme — propongo.

— bien — Nina cuelga el celular, entonces miró uno de los periódicos sobre próximas campañas y elecciones, entre ellos el multimillonario y empresario Blackwood.

— cariño... —La rubia acaricia mi pecho.

—Veo las propuestas de campaña para las próximas elecciones, querida —.

—Deberías descansar.

— pequeña, recuerda tu lugar, eres una zorrita que se acuesta con hombres con pareja porque no tiene amor propio, y le gusta sentirse deseada, por eso deseas lo que otras, problemas de inseguridad, pero yo soy un mafioso multimillonario que a diferencia de ti uso mi cerebro y no mi trasero como cajero automático — 

Sé lo que dije, sé que le dolió o, si no, no se hubiera parado de la cama. La verdad no me importa que tanto le pudo doler, no tengo la responsabilidad de hacerla sentir bien. 

La verdad duele, no dije ninguna mentira, no hay mentira en mis palabras, nadie puede juzgarte por decir la verdad.

Revisé las fotos de los periódicos y sus supuestas promesas, miré dentro de la habitación, pensando en qué hacer.

¿Qué opciones tengo? 

¿Matarlo?

¿Secuestrarlos?

¿Torturarlo?

—Buenos...— Patrick entra en la habitación, sus palabras se acortan, pero cuando nota que estoy despierto, culmina su cordial saludo.

—Días, Daemon — su mirada se centra en mientras la sexy rubia de ojos verdes empieza a recoger su interior del suelo, evitando que las sábanas se resbalen.

—: tengo lo que pediste... Te espero abajo — cruzó los brazos tras de su espalda y salió del lugar—, parecía disgustado, como si nunca me hubiera visto con chicas en momentos inapropiados. Me ha visto muchas veces.

No debería sorprenderse de la presencia de una mujer en mi cama, no debería voltear a verme con suspiro de tristeza. 

— Vístete — agarró mi bata, me envuelvo en ella y salgo a la sala. Lo veo caminando de un lado al otro, con las manos cruzadas tras de su espalda, mirando al suelo pensativo.

—¿Qué pasó? — Se gira lentamente para tenerlo cara a cara.

— dijiste que la amabas — suelta. 

—La amo —rectificó.
No es mentira, amo mucho a Nina.

— ¿En serio la amas?—Camina hacia mí.

—Sí— afirmó. 

—¿Conoces el significado de esa palabra, al menos? —Me quedé en silencio, tragué saliva.

—Sí — me mentí a mí mismo, no quería hacer preguntas con cero importancia.

— Escucha, Nina es una chica loca, retorcida y asesina... pero ahora la entiendo, entiendo por qué hace todas esas cosas... Necesita ayuda psicológica. Una chica que conoce el mundo y que, totalmente programada para despreciarlo cuando conoce, él acosó en su escuela dándole la razón a su padre, podría solucionarse con un buen psicólogo...

Pero… ¿Qué te justifica a ti? ¿Conoces que puedes ser bueno, por lo menos no jugar con el corazón de una chica que probablemente desarrolle dependencia emocional a ti porque eres la viva reencarnación de su padre?—

—No me compares... Yo no uso a Dios para respaldar mis intenciones — me siento en el mueble y cruzo las piernas. 

— no ... Tú eres tú.

—¿Por qué te importa? —

—Porque, a diferencia de ti, no me conformé e investigué más. Nina tenía razón, su primera víctima quería suicidarse, creo que hay una parte humana en ella, le dan tanta libertad porque querían convertir a Lirio en Nina.