𝑪𝑨𝑳𝑳 𝑴𝑬 𝑴𝑨𝒀𝑩𝑬 | 𝑫𝒖𝒌𝒊

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Mauro

Hace como una hora que estábamos en stream en el canal del Lit, hablando boludeces y jodiendo.

A Rusher se le ocurrió buscar una base y empezamos a improvisar. Empezó él, después Lit y seguí yo.

—...cara de que me lo gané antes
Goddamn Duko agota los parlantes
Camina pa' alante se pone más grande
Y le gritan goddamn Duko flow se expande
Como si fuese esa mierda de el lucro y la tierra
Ellos serán perros y ahora los tengo de perras
Yeah, y cada tanto...

Me distraje cuando por la cámara vi que había entrado Mari con Belén a la habitación.

—Ibas re bien amigo— dijo Rusher, parándose para ir a saludar a las pibas.

—Na si fue malisimo— jodio Lit.

—Vos sos malisimo— le pegué al gorro qué tenia puesto, haciendo que se le cayera.

—Para, boludo, es Louis Vuitton.

—Que va a ser Louis Vuitton si la compraste en la feria a 3 peso'.

—No me queme' amigo, tienen que pensar que me visto caro.

Todos nos pusimos a reír.

Se acercó Rusher con Mari y Belén, quienes nos saludaron.

—¿Qué hacen?— preguntó Mari.

—En stream— respondió Lit—, saluden a la gente.

Se sentaron y nos quedamos un largo rato hablando de diferentes cosas y escuchando música, muchos en el chat ubicaban a la Belén y le hacían preguntas.

En un momento empecé a ver comentarios de que yo la miraba mucho, que creían que me gustaba y tal.

Aunque era verdad, no pensé que fuera tan obvio.

Después de un rato bajé y me quedé en el living, me llegó la inspiración así que empecé a escribir.

Al rato me fui a pegar una ducha y cuando me vestí volví al living, para mí sorpresa la Belén estaba ahí, y estaba viendo mi cuaderno.

—Es tuyo, ¿o no?— preguntó y volvió a dejarlo sobre la mesa.

—Si.

—Ahh, esta wena esta canción.

—Todavia no la termino igual.

—Ahh.

Me senté y ella se sentó al lado mío.

—¿Ya sabí cómo se va a llamar?

—Todavia no, la estaba escribiendo hace un rato no más.

—Llegué en pleno proceso creativo entonces— se rió.

—Si, surgió la inspiración.

—¿Y qué te inspiró?

—Mm...una minita rubia, de ojitos marrones y una sonrisa uff, hermosa la pibita.

Ella rodó los ojos, pero después sonrió.

No puede ser tan linda esta mina, loco.

—Igual no hablo de vos— dije jodiendo—, no te ilusiones, flaca.

—Ay, estúpido.

Me tiró un almohadón y me puse a reír.

Me encantaba molestarla.

—¿Cuándo volvés a Chile?

—El sábado.

En 2 días.

—¿Segura?, porque la última vez que dijiste eso te terminaste quedando una semana más.

—Si, ahora si, tengo cosas que hacer allá.

—Ahh, entonces suerte en tus proyectos.

—Gracias.

—Y suerte en el viaje.

—Gracias.

—Y suerte en...todo.

—Aún no me voy, Mauro.

—Y ya sé, pero...te voy a extrañar.

Se quedó mirandome, me di cuenta que se quiso formar una sonrisa en su cara, pero de golpe se esfumó.

Algo estaba pensando, sentí que durante unos segundos su mente se transportó a otro lugar.

Vi cómo abrió la boca, como si estuviera a punto de decir algo, aunque enseguida pareció arrepentirse.

Estuve a punto de preguntar sobre lo que pensaba, pero me sorprendió cuando se acercó con determinación y me abrazó, enrrollando sus brazos en mi cuello. Sin pensarlo correspondí el abrazo y envolví su cintura, no entendía el porque de este abrazo, solo sabía que desde que la vi en los premios quería hacerlo.

De pronto, sentí cómo su cuerpo temblaba y, al escucharla, supe que estaba llorando.

—Belu— acaricié su espalda para tranquilizarla.

Intenté apartarme para poder mirarla, pero se aferró con más fuerza a mi cuello.

—Belu, ¿qué pasa?

Por sí misma se separó unos segundos y luego se tapó la cara, pero su llanto se intensificó.

—Perdón— dijo entre sollozos—, perdón, Mauro.

Tomé su cara con mis manos, ella bajó las suyas y me miró.

Ver su cara llena de lágrimas me rompió el corazón.

—¿Qué pasó?

Escuché la voz de Tiago y miré en su dirección, estaba con María y Rusher. Ni si quiera se en que momento habían bajado.

Belu agachó la cabeza, claramente no quería que la vieran en ese estado, así que sin pensarlo la tomé de la mano y me la llevé.

—¿Qué le pasó a Belu?— preguntó María con preocupación.

—Después hablamos— dije sin más al pasar al lado de ellos y subir.