Una vida quitada por una furia incontrolable, un recuerdo perdido escondido tras la locura.
Ambos tan diferentes pero ligeramente unidos.
Nadie sabe de que uno es realmente capas hasta que decides romper el hilo de la cordura y dejar que tu cuerpo...
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Estaba sentada en ese sofa donde una vez contabamos sobre nosotros, le había explicado mejor mi situación y el afirmó todo lo que decían pero que no sabía nada de su hermano.
-El día que escapé no supe más de él, solo una cosa me diferencia de tí, tú mataste y te fuiste por miedo sabiendo que ya estabas sola, yo maté y huí para alejarme de todo lo que me atormentaba, el recuerdo de mi madre, los gritos y golpes de mi padre y el odio de mi hermano -su voz era calmada pero su mirada era apagada-
-¿Por qué te odiaba tu hermano? -lo miraba con tristeza-
-Después de que su padre se fuera él se quedó solo, mamá lo ignoraba, le recordaba al que una vez fue el amor de su vida y solo se preocupaba por mí...pero él también odió a la mujer que sedujo a su padre aunque no sé nada de ella
-Sabes es curioso, desde la muerte de mi madre solo pasan una cosa detrás de otra, a veces ni confio en mi misma -me recosté al sofá suspirando-
-Tú solamente estás asustada, todo esto pasa muy rápido y apenas puedes asimilarlo -me miró fijamente- Lillian es mejor si te quedas aquí que con tu amigo tengo un mal presentimiento, aquí nadie te encontrará puedo asegurate eso y yo te puedo cuidar, no serás una carga
Lo miré con ternura, no sé como lo hace pero sus palabras siempre logran calmarme
-¿Por qué me ayuda? sonreí inconscientemente-
-Eso hacen los...amigos...¿no? -desvió la mirada-
-¿Me consideras tu amiga? -reí al notar que brotaba cierto nerviosismo de él-
-Te considero más que eso -dijo en un ligero susurro que logré escuchar-
-Gracias, por ser mi amigo Nathan -me acerqué a él abrazándolo-
-No tienes nada que agradecerme, solo quiero que estés bien
[...]
Han pasado unas semanas, casi ya un mes desde la muerte de mi madre, Allister está muy insistente en que regrese a su casa y me olvide de Nathan quien asegura que me hará daño pero yo sólo lo voy a ver en ocasiones, su amigo, Nolan, sigo sin confiar completamente en él y se me hace muy raro que me ayude sin ninguna razón, además de que no ha parado de hacerme preguntas de mi vida privada con la supuesta excusa de que eso ayudará a encontra una inocencia, por mi lado ya dí por sentado que soy la culpable de la muerte de mi madre, tarde o temprano tenía que asimilarlo, pero aún así no quería que me atraparan esa es la razón por la que ahora vivo con Nathan.
La relación entre mi salvador y yo, crece a medida que pasan los días, me encanta hacerle bromas pesadas sólo por el hecho de que me divierte molestarlo, él cuida de mi como si fuera la hermana menor que nunca tuvo, claro que a vecees tenemos pequeñas peleas por cosas insignificantes, como cuando voy a visitar a Allister, ambos son mis amigos y no se odian pero son las únicas personas que están de mi lado justo ahora.
