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La existencia de Jiang Yinsheng era algo especial para Jun Zishu.

Había irrumpido bruscamente en su vida, le había contado algunas cosas y se había marchado tan repentinamente como apareció.

Aunque Jun Zishu no sintió una intensa angustia, la invadió una sensación de impotencia. Era como si su cuerpo se hubiera quedado sin fuerzas y no pudiera hacer nada.

Aun así, Jun Zishu necesitaba animarse delante de los demás. Nadie sabía que Jiang Yinsheng había existido en su mundo. Era una tristeza que debía afrontar por sí misma.

Hada Pequeña no sabía cómo ayudar a Jun Zishu a salir de ese estado sombrío. Lo único que podía hacer era intentar hacer reír a su anfitriona.

Era bueno que Hada Pequeña estuviera presente. Al menos, Jun Zishu podía estar segura de que no había alucinado con la existencia del pequeño fantasma.

...

El tercer caso fue un allanamiento de morada y un robo, y Jun Zishu atrapó al asesino sin mucho esfuerzo.

Tras completar su misión, Jun Zishu decidió abandonar inmediatamente el mundo de la misión. Este no era su mundo original, y no había razón para que se quedara aquí.

Tras salir del espacio de tránsito, Jun Zishu decidió no dirigirse a la División de Separación de Emociones por primera vez. No quería olvidarse del lindo y dulce fantasmita que había hecho todo lo posible por acompañarla. Tampoco quería olvidarse de los autodescubrimientos que había hecho.

Cuando su reloj de pulsera emitió un pitido indicando que su paga había sido ingresada en su cuenta, Jun Zishu sólo le echó un vistazo antes de tirarse en la cama. Ahora lo único que quería era dormir.

Así, tras cambiar la ventana virtual para que mostrara el tiempo lluvioso, Jun Zishu se durmió entre el sonido de la lluvia.

Jun Zishu parecía haber tenido un sueño, pero no recordaba lo que había soñado cuando volvió a abrir los ojos. Y a pesar de haber dormido durante muchas horas, una inexplicable sensación de agotamiento la envolvió.

Sin embargo, después de comer y ver una película en el cine, esta sensación de vacío e inquietud mejoró. Pasara lo que pasara, la vida debía continuar. Al fin y al cabo, le había prometido al pequeño fantasma vivir feliz.

Después de pasar unos días arreglando su estado mental, Jun Zishu regresó de nuevo al espacio de tránsito.

"¡Anfitrión! ¡Anfitrión!

Hada Pequeña no había hecho casi nada en el mundo de la misión anterior. Además, apenas había hablado en toda la misión, por lo que no pudo evitar sentirse un poco sola. Así, después de ver a Jun Zishu de nuevo, se abalanzó sobre su anfitrión emocionada.

"Mhm."

Jun Zishu apretó el cuerpo de la pequeña duendecilla y la sostuvo entre sus manos. Hada Pequeña era bastante bonita. El aleteo de las alas de su espalda era especialmente hermoso, e incluso irradiaban un tenue resplandor.

"¡Vamos ya al otro mundo!". dijo Hada Pequeña con entusiasmo.

"¿Con qué división trabajaremos esta vez?".

"La División Anti-Stand-in".

"¿Oh?"

Jun Zishu levantó una ceja, sintiendo cierta curiosidad.

"En el caso de la División Stand-in, harás el papel de suplente y eliminarás a la Julieta del protagonista masculino, ocupando su lugar. En la División Anti-Stand-in, tu trabajo es mandar a volar al protagonista masculino, asegurándote de que no se junte con nadie."

La Señorita Prima Siempre está Ocupada [GL] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora