꞉ꪉ₊· ͟͟͞͞➳˚| «𝑰𝑵𝑶𝑪𝑬𝑵𝑻𝑬ˡᵘⁱᶜⁱᶠᵉʳ» |୭̥*ೃ

5 - 𝑳𝑰𝑳𝑰𝑻𝑯...

Isabela estaba con Emily jugando con un pequeño cachorro que se encontraba ahi, el pequeño solo podía saltar y rodar por todo el piso mientras Isabela le rascaba su barriga y Emily le daba premios.

— Aveces me pregunto si a Charlie le gustaría esto — Dijo la pequeña Serafín mientras miraba con nostalgia al cachorro

— Hablando de eso...— Dijo la Joven de ojos verdes mirando con nerviosismo a su contraria

Emily vio con confusión a la joven mientras que esta ponía su mano atrás de su cuello y desviaba la mirada

— Es posible que Charlie venga para ser testigo en el juicio de tu hermana, Adán y Lute...— Dijo esta manteniendo su mirada en el cachorro jugando

— Mhm...así que al final Dios si va a castigar a mi hermana — La mirada de la más pequeña se volvió seria miró a la joven enfrente de ella — Apuesto a que Lucifer también vendrá, cierto? — Agregó

— No lo se, aun tengo que ir con Azrael o Leo para invitarlos a que vengan...aunque, dudo que ellos quieran después de tanta masacre que se armo en su reino — La Angel se levantó del suelo y miró a Emily — Y sobre tu hermana, ella no será castigada de una manera tan horrenda como piensas, simplemente se le quitaran los beneficios que tenía como la Serafín mayor —

Emily solo agacho su cabeza y apretó sus puños para tratar de contener sus lágrimas que estaban amenazando por salir

— Gracias, Isabela — Dijo con voz temblorosa

— No me agradezcas nada...fue Padre quien a decidido esto, aunque aún no se que castigo se le pondrá a Adán y Lute — Miró con tristeza a su amiga que aún seguía sentada junto al pequeño animal

Isabela le ofreció su mano a Emily para que esta se levantara, este gesto fue aceptado por la Serafín para después abrazar con fuerzas a su amiga... ella siempre la apoyaba y lograba hacer sentir mejor, conocía a la joven desde que Emily fue creada aunque en ese entonces Isabela tenía tiempo de haber sido creada, congenio muy bien con la Serafín, siendo las encargadas de repartir alegría entre todas las Almas, Arcángeles y Serafínes.

— Debo irme... necesito hablar con Gabriel, para ver si me puede ayudar a convencer a Lucifer en dado caso que no quiera venir — Se separo del abrazo y miró con una sonrisa cálida a su amiga

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— Estas jodiendome no Adán?—

— No, Lilith, tu pequeña perra logró enfrentarnos con sus pecadores y para colmo tu amado Lucifer se metió a la pelea, sin mencionar que casi me mata — Miró con enojo a la mujer sentada en el camastro

— Si te vuelves a referir así de mi hija, prometo que nuestro trato se me olvidara y acabaré lo que inicio Luci — Esta se quito los lentes y dejo ver sus ojos

— Tu no tienes derecho a amenzar a mi señor de esa manera mujer — Lute se puso enfrente de Adán quien solo desvio la mirada

— Ja!... por fin se declararon los tortolitos o siguen besándose a escondidas de todos? — Cuestiono la mujer mientras Jugaba con su collar de perlas

— Cállate — Respondió el hombre

— Como sea, no puedo bajar así como así al infierno... no acabe bien con Luci la última vez y mi hija piensa que nisiquiera me interesa — Se quito el sombrero y dejo su bebida a un lado

— Eso a mi no me importa, pero si no bajas ahora, esos idiotas van a venir al juicio y Apoyaran el castigo que se me dará — Tomo el hombro de su mano derecha y la quito suavemente para acercarse más a Lilith

— Déjalos que lleguen, será más fácil — Se levantó del camastro y se puso frente a frente con Adán

Lilith era de la misma altura que Adán así que ambos se quedaron viendo unos minutos para que después Lilith solamente frunciera el ceño y mirara hacia arriba

— Solo te digo una cosa... si ellos se enteran que tu acordaste que si matabamos a los demonios que tu querías podriamos hacer lo que a nosotros se nos antojara, tu hija te odiara y tu maldito perro se decepcionará de ti...— Adán lo dijo seriamente y empezó a caminar para salir de ese lugar

Lute quería darle una buena cachetada a la Demonio que estaba con los ojos cerrados, pero sabía que esta sin problemas acabaría con ella...el poder que obtuvo en el infierno seguía estando intacto, bastaría con que esta empezará a cantar una melodía para que Lute en el mejor de los casos callera desmayada o...muriera dolorosamente

Lilith Soltó un suspiro pesado y se dispuso a caminar hacia su habitación que se le había asignado por Adán para que nadie la molestara durante su estadía ahí y claro...nadie se diera cuenta que tenía una cierta relación de tratos con el que había sido su "esposo" si así se le podía llamar pues la mujer nunca amo al primer hombre, su corazón se lo había robado aquel ángel de ojos azules, quien era el favorito de Dios, el más sabio y por supuesto el más bello.
Se quito su collar de perlas y lo miro unos minutos para después recordar al que era su primer amor...

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— Segura que estás lista para bajar Isa?— Cuestiono Azrael mientras la miraba con preocupación

— Si...no te preocupes, mi espalda se recupero y ya no me duele cuando elevo mis alas — Ella tomo la mano de su amigo para darle confianza

— De acuerdo, entonces bajemos — El más alto de los tres Hablo mientras abría el portal hacia el infierno

Isabela fue la primera en entrar seguido de ella fue Leo y al último Azarel quien no tenia tantas ganas de bajar, dado que aún recordaba como Lucifer había besado los nudillos de su hermosa amiga...resaba para que el rey demonio no tuviera sus ojos puestos en la Angel.

Isabela llego justo a unos metros del hotel que se veía ya reconstruido, vaya que habían trabajado muy bien en este durante las últimas dos semanas que habían pasado desde la exterminacion fallida

— No me sorprende, Lucifer tiene poder suficiente para reconstruir este hotel cuantas veces quiera — Leo miró con desprecio el hotel, si bien era creyente que existían las segundas oportunidades,  para él Luzbel no podía tenerla por tanto desastre que causo en el edén

— Si...lastima que su mujer esté en el cielo disfrutando de las comodidades mientras que él y su hija están sufriendo por su ausencia — Agregó Azrael riendo burlón por el como Leo miraba el hotel

— Basta, se supone que la infantil aquí soy yo! — Mencionó la chica de pelo casi dorado mirando con un puchero a sus dos amigos

Se volteo para empezar a caminar hacia la puerta del hotel con Azrael y Leo atrás suyo protegiéndola, creían que Lucifer estaría dispuesto a pelear con tal de no escucharlos, dado que en el momento en que este cayó del cielo, dejó en claro que odiaba a su padre más que a nada en el mundo.

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Holisss, por fin actualize después de tener tremendo bloqueo mental  jajajaja
Bueno, sin más por el momento me despido!

¡Hasta la próxima actualización!
BYEE🫶🏻