Obsesión a primera vista. (Oc Fem × Mordecai Heller).

Capítulo 22 | Borracha. | ✓✓

San Luis Misuri, 24 de diciembre,
Hotel Maribel. 1928.

Todos los miembros de la pandilla Marigold estaban en el bar clandestino Marigold Room.
¿Qué mejor manera de celebrar la Navidad que con tus "amigables" compañeros de trabajo ?
Asa Sweet estaba fumando su cigarrillo, Wes Clyde fumaba un cigarrillo mientras hablaba con Fish que estaba bebiendo.

Otros tipos que eran conocidos del Sr. Sweet estaban por ahí sentados en una mesa jugando al póquer mientras se reían. Serafine Savoy fumaba mientras veía a su hermano Nicodeme Savoy bebiendo Bourbon y coqueteando con Moxie.

Mordecai miró seriamente a todos los que bebían y se sintió incómodo. Al estar distanciado de sus colegas y de su jefe, el Sr. Sweet, el rostro de Heller permaneció inexpresivo y estoico mientras estudiaba cada una de sus acciones.

Mordecai frunció el ceño y gruñó enojado al ver a Nicodeme tan cerca de la felina. Entrecerró sus ojos verdes y se ajustó sus pequeñas gafas circulares mientras su cola se movía con frustración y sus orejas se tensaban. No era un felino experto en socializar.

La hembra felina río y bebió un sorbo de su whisky. "Apreció tu oferta Nicodeme pero ya sabes que mi corazón le pertenece a alguien más."

Nicodeme ebrio le sonrió, "Sé lo que quieres decir." Se acercó a Moxie, su mano se deslizó por su cadera y se inclinó hacia ella...

Ella rodó los ojos divertida, después se aleja de Nicodeme y se acerca a Mordecai.

El felino permaneció sentado y la observaba con la vista fija en sus movimientos. Su rostro no cambió cuando la gata se acercó y se sentó a su lado. Su expresión permaneció estoica e impenetrable mientras cruzaba los brazos.

Heller permaneció en silencio, esperando que ella hablara. Inclinó ligeramente la cabeza hacia un lado para poder verla mejor mientras ella permanecía de pie.

"¿Por qué tan solo?"

Mordecai gruñó suavemente molesto, recostándose en su silla y cruzándose de brazos. Sus oídos se tensaron y la miró fijamente. No le gustó que le hicieran la pregunta. Había estado encerrado toda la noche, observando a los demás pero sin encontrar consuelo en la compañía de sus colegas criminales.

El gato gruñó y miró hacia otro lado con desinterés, no queriendo entablar ningún tipo de conversación. Sus ojos verdes se entrecerraron mientras olfateaba molesto y su cola se movía de un lado a otro.

"Permíteme hacerte compañía." Insistió ella.

Mordecai gruñó, recostándose en su silla y cruzándose de brazos. Él la miró por encima de sus gafas y sus orejas parpadearon. No le gustó el hecho de que ella se hubiera acercado a él en ese estado y quisiera su atención. Se reclinó en su silla, moviendo la cola con molestia mientras entrecerraba los ojos y movía las garras.

"Por favor~" Ella toma la mano de Mordecai y lo mira con un toque de lujuria.

El rostro de Mordecai se sonrojó un poco ante la intimidad de su acción. Quedó atónito cuando ella le tocó la mano y su rostro se contrajo ansiosamente mientras miraba hacia otro lado. El gato gruñó irritado y retiró su mano de la de ella.

No le gustaba el contacto físico con ninguna mujer, especialmente con ella. Él gruñó suavemente molesto y la miró con el ceño fruncido, sintiéndose incómodo con la forma en que ella estaba tan cerca de él.