El principe se enamoró. ¡DAM!¡BITCH! [OMEGAVERSE][TERMINADA][Corregido]

- Adán -

El reloj del exterminio dejó caer el último grano de arena, desde el cielo, un portal dorado se abría en el cielo infernal, mientras un ejército alado bajaba buscando directamente el hotel de esa pequeña maldita hija de Lucifer.

Mientras en el hotel, Miles de demonios se encontraban armados, listos para la pelea, Zestial, Carmilla y Rosie sonreían contentos, habían pasado años desde que el infierno se levantaba de esta manera.

¡Esto es encantador Alastor! - Rosie sonreía mientras tenía una ropita para bebé, de color amarillo a petición de su rey.

Me dedico a mis propias canciones de estúpidas enamoradas - Alastor suspiró mientras Lucifer le traía envuelto en un género, su micrófono.

Es un gusto, Lucifer - Zestial saludó al alfa.

Un placer, Zestial, gracias por la ayuda de la otra vez - Lucifer sonrió al demonio alfa.

Claro, por un amigo, lo que sea - Zestial sonrió mientras Lucifer sacaba el micrófono del género.

Esta pieza, Alastor - Carmilla comenzó pues ella misma se había encargado de reforzarla - Es de extraña exquisitez a petición de nuestro rey, como puedes ver, hice un hueco para que se permita el aumento vocal en una ráfaga, también, tiene la zona a baja y alta con la posibilidad de convertirse en una lanza - Alastor tomó con delicadeza.

Gracias - Lucifer sonrió ante el agradecimiento, Alastor miró a Carmilla - como siempre eres la reina de las armas, querida.

Por supuesto que lo es - Carmilla sonrió con amor ante las palabras de Zestial.

Gracias por la ayuda, Carmilla - Vaggie sonrió cuando el Omega acarició su cabeza como si Vaggie fuera alguna de sus hijas, le molestaba que la chica estuviera aquí, puesto que sus propias niñas estaban seguras en casa.

¡Llegaron, papá! - Charlie gritó cuando vio a los ángeles acercarse con Adán, Será y Lute.

¡Hola, hijo de puta! - Adán se reía mientras Será se mantenía seria a su lado, tenía que terminar con todo esto antes de que Dios se diera cuenta de todo.

oh, voy a joderte - Lucifer se lanzó al cielo con un grito y la batalla comenzó, demonios armados acribillaban ángeles mientras los caníbales devoraban.

¡No puedes simplemente aceptar tu destino! - Adán gritó mientras apuntaba a Lucifer, el rey lo esquivó, pero lo que no vio es que en realidad apuntaba a Alastor que estaba haciendo un escudo, pero Alastor había aumentado su nivel, con un tentáculo derribó el ataque.

¡Hijo de - Eso enojó a Lucifer haciéndolo sacar sus cuernos.

¡Suéltalo! - Charlie golpeó a Será para que soltara a Niffty.

¡Ni te atrevas! - Vaggie se lanzó sobre Lute que intentaba ir por la espalda de Charlie.

Adán se sorprendió cuando Lucifer lo tomó del cuello y lo estampó en el suelo, llenando su cara de golpes, Lute se lanzó sobre Lucifer, que de la furia la atravesó con una mano, acabando la de inmediato.

¡Lute! - Adán gruñó enfadado.

¡Mueran! - Cherri y Angel lanzaban balas y bombas, mientras Husk y Sir Pentious le cubrían las espaldas con cartas y espadas.

¡Mátalo ahora, Adán! - Será gruñó mientras recibía un puño de parte de Charlie.

¿Matar a quién? - Dios preguntó mientras bajaba junto a Emily de un rayo de luz.

¿¡Dios!? - Será y Adán estaban cagados de miedo.

¡Me cago en Dios! - Lucifer gritó y todo el infierno.

¿Tú les enseñaste eso, Lucifer? - Dios le preguntó a su hijo mientras Emily saludaba con la mano a Charlie.

No te voy a mentir... sí fui yo - Lucifer suspiró.

¡Papa! - Charlie y su manada corrieron hasta Lucifer, el rey abrazó a su hija junto a Alastor y, detuvo al resto detrás de sus alas.

¿¡Tengo una nieta!? ¿¡Tienes una manada!? - Dios miró con sorpresa a su hijo todo golpeado mientras Adán y Será comenzaban con su show.

Padre, Lucifer amenazó al cielo, teníamos que detenerlo, proteger las almas - Será explicaba.

Ahorrarlo, será - Emily la miró con asco.

Chisme - Rosie se acercó con los otros dos mientras miraban bien el drama.

Emily... - Será suspiró.

Ustedes no regresarán al cielo - la mirada de Dios se oscureció mientras los ángeles eran absorbidos por portales entre gritos, congelándose al entrar en contacto con la dimensión.

¡Dios! - Adán estaba asustado.

Será - Dios se acercó con una mirada perturbadora, la delegada trató de correr, pero las manos de Dios la sostuvieron y de un solo tirón y con un grito desgarrador, le quitó las alas.

NOOO - Será se retorcía en el suelo de dolor.

Serás humana, inmortal, condenada por siempre a vagar con el amor que alguna vez tuviste en la punta de tus manos, pero con la maldición, de siempre perderlo ante la muerte - Dios dejó que Será cayera en un portal tomando forma humana, caída directamente desde el cielo a la tierra, con la intención de que sienta el dolor, su sangre, cambiando de dorada a roja mientras se retorcía por el instinto de volar.

No, no, No - Adán retrocedía ante cada paso que Dios daba cerca de él.

Emily se cubrió los ojos, Dios tomó los cuernos de Adán, y de un tirón, separó la cabeza del cuerpo.

Lucifer miraba con los ojos bien abiertos, ¿Su padre había detenido de verdad el exterminio? ¿No era mentira todo lo que había dicho?

Bueno... ¿Waffles? - Dios le preguntó a su hijo, mientras todos los miraban con la boca abierta.

Mejor nos vamos - Zestial, Carmilla y Rosie se retiraron con su gente, puesto que habían vivido y no planeaban infortunar el camino de Dios.

¿Qué? - Lucifer se asustó cuando Dios lo tomó entre sus brazos y lo abrazó fuertemente.

Mientras Dios abrazaba a Lucifer, Emily se acercó sonriente hasta Charlie.

¡Hola, hola, soy Emily, es un gusto conocer a la hija y la manada del príncipe del cielo! - Emily saludó feliz.

¡Hola, soy Charlie, ellos son Alastor, Angel, Husk, Niffty, Vaggie, Sir Pentious y Cherri! - Charlie sonrió mientras Vaggie la revisaba preocupada.

¡Tengo una nieta! - Dios levantó en sus brazos a Charlie que se sostuvo asustada de caer, era alto.

Lucifer - los ojos de Dios se fijaron en el demonio de la radio que llamaba a su hijo, dejando a su nieta en el suelo, se acercó a Alastor, conocía esa mirada de su hijo, la mordida delataba la unión, además del aroma a embarazo, pero Lucifer se puso con las alas abiertas frente a las garras, gruñendo al otro alfa, a su padre.

¡Ni los mires! - Lucifer gruñó.