- amor-

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Todos estaban en la sala, tratando de hacer sentir a Alastor, lo cual no estaba funcionando para nada.

- ¡Te traje manzanas de caramelo! - Lucifer entró con una sonrisa y todos lo miraron.

- ¿Papá? - Charlie sonrió nerviosa mientras el demonio de la radio sufría estática del puro estrés.

- ¿Sí, mi manzanita? - Lucifer dejó la bolsa con dulces sobre la mesa.

- Alastor no te envió a buscar manzanas de caramelo, ¿entregaste la carta para Rosie? - Vaggie preguntó de brazos cruzados.

- Oh... ja... no me lo van a creer, Vaggie - Lucifer se metió la mano al bolsillo donde sintió la carta de papel, se mordió el labio nervioso.

- ¡Agárrenme porque lo mato! - Alastor fue agarrado por Angel, que estaba asustado por no ser atacado por el demonio de la radio.

- Corre a entregar esa carta, nosotros lo retenemos - Husk le dio un sorbo a la botella mientras cambiaba para ayudar a Angel.

Lucifer salió corriendo por la puerta, brindando portales para llegar rápido al barrio caníbal y solicitar apoyo voluntario para la batalla contra el cielo.

- Hagan algo - Niffty dijo mirando a Angel y Vaggie.

- Mi amor, ya estoy haciendo algo - Angel sostenía al demonio que soltaba estática roja por todos lados.

- ¿Qué más quieres? - Vaggie gruñó molesta, ellos siempre tenían que arreglar todo.

- Niffty, no creo que sea el momento - Charlie no quería molestar a todos los omegas; todos sabían que eso era receta para el fracaso total de una manada.

- ¡Los omegas calman a otros omegas! - Niffty chilló; en su época, era muy normal ronronear para los otros omegas en muestra de apoyo y consuelo.

- ¡Ja! - Husk se rió.

- Bien... veamos... prrr - Angel comenzó a ronronear y Alastor lo miró impactado, pero después de unos segundos aceptó el ronroneo y él mismo lo hizo de regreso.

- Vaggie, creo que tienes que ir tú también - Charlie le sonrió a su novia, que suspiró acercándose a los otros dos; apenas se ubicó al lado de ellos, comenzó a ronronear. Los tres lo hacían al mismo tiempo, y eso los hacía calmarse. Cuando estaban ya tranquilos, Alastor se recompuso y volvió a su posición orgullosa.

- Lo siento por eso... Estoy un poco extraño últimamente - Alastor no quería decir que era por culpa del embarazo, aunque evidentemente lo era; habían pasado ya unas semanas, y habían conseguido ayuda de Carmilla y Zestial; solo faltaba Rosie, pero ella solamente recibía este tipo de solicitudes por carta de manera formal.

- ¡Dos semanas! - Niffty chilló feliz.

- Sí, Niffty, ya tiene dos semanas de embarazo - Husk calmó a la chica de un ojo que se fue riendo como loca.

- Bueno... tenemos suerte de ya saber cómo se mata a un ángel - Vaggie suspiró mientras se peinaba el cabello.

- ¿Estás seguro de luchar, Al? - Charlie se sentó preocupada al lado del demonio de la radio.

- Claro que estoy seguro de participar en esta batalla, que me encuentre gestante no significa que no pueda utilizar mis habilidades para luchar. Además, con lo paranoico que es tu padre, lo más seguro es que esté pendiente de mí durante la batalla - Alastor sonrió muy seguro de sí mismo.

- Además, Al ha estado bebiendo sangre de ángel - Angel Dust sonrió de manera pícara - ya sabes a lo que me refiero, Al~ - Alastor le gruñó al omega menor que rió mientras tomaba a Fat Nuggets en sus manos.

- ¿Los caníbales vendrán? - Charlie miró preocupada a Alastor - papá es el rey del infierno y todo eso, pero se alejó demasiado del pueblo, por mucho tiempo, no sé si la gente está dispuesta a seguirlo - la princesa del infierno miró a todos un poco nerviosa.

Cuando Alastor iba a responder, la puerta del hotel se abrió de par en par.

- ¡Llegamos! - Sir Pentious y Cherri Bomb entraron felices.

- ¿¡Dónde estaban ustedes dos!? - Gritó Angel acercándose a ver a Cherri.

- Marcando a esa lindura viscosa - Todos miraron directamente al cuello de Sir Pentious donde había un montón de mordidas.

- ¡Ahora tenemos jefa! - Chilló uno de los huevitos.

- ¡Cállense! - Sir Pentious se acercó avergonzado; entonces ambos, la serpiente y Cherri, sintieron una conexión recorrer todo su cuerpo.

- Oh, sí, ahora somos una manada - Charlie sonrió.

- Oh... qué rápido va la vida - Cherri se rió mientras Sir Pentious se acercaba a Alastor.

- Ya descubrí cómo se mueren los... - Sir Pentious se quedó en silencio ante la mano alzada de Alastor.

- Ya lo descubrimos - Alastor vio a Sir Pentious; sus ojos se llenaron de lágrimas y se enrolló con sus huevos alrededor de Cherri mientras lloraba.

- ¡Estaban buscando esa información para que ya la sepan! - Lloraba Charlie; se acercó calmándolo, pero Cherri le gruñó y luego rió.

- Lo siento, yo lo calmo - y con una sonrisa la mujer tomó de la mano a su pareja y se lo llevó al segundo piso.

- Se lo va a coger - Husky suspiró.

- ¿Habías mandado a eso a Sir Pentious? - Vaggie miró a Alastor, mientras Angel miraba el camino de su amiga con una sonrisa y volvía a la conversación.

- Ya sabía que Charlie no permitiría más exterminio, tenía que estar preparado para cualquier cosa - Alastor suspiró.

- Awww Al, eso es muy tierno - Charlie comenzó a saltar y cantar alrededor de su manada, mientras arcoíris salían de su alrededor, mientras reía y era feliz; los demás lo miraban.

- Déjala, así duerme de largo en la noche - Vaggie se sentó en el sillón con calma.

Mientras en el cielo:

- ¿Es necesaria esa espada? - Emily miró nerviosa a Dios, que realmente estaba planeando el castigo para Adán y sera.

- Sí, tienes razón, es demasiado. Al ejército los enviaré a la dimensión de hielo, para que se congelen por el resto de la eternidad - Emily no diría nada, el castigo de Dios era justo.

- ¿Adán y sera? - Preguntó un poco nerviosa por la mujer que alguna vez admiró.

- Adán morirá, y sera... se volverá caída a la tierra sin alas ni poderes, condenada a bajar por siempre en la vida eterna - Dios estaba ingenioso dando castigos, algo que Lucifer había heredado de su padre celestial.

El principe se enamoró. ¡DAM!¡BITCH! [OMEGAVERSE][TERMINADA][Corregido]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora