Capítulo 23: La pobreza del club EIKEN

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Como era de esperar, ya no puedo ignorarla, así que dejo de trabajar.

¿Qué? ¿Por qué de repente viniste a mi lado, Ena-chan?

"... Lo siento. De ese lado, el sol de la tarde brilla mucho y es molesto".

Antes de que pudiera preguntar algo, Ena-chan explicó su accionar.

Por supuesto, a través de la ventana de la oficina brillaba una luz del sol ligeramente anaranjada. Aunque ¿No parecía que fuera particularmente deslumbrante...?

Aunque sospechaba algo, decidí no insistir más.

"Ya veo. En ese caso, trabajaré en ese lado".

"Eh!......"

"No me molesta ese brillo, incluso si es un poco deslumbrante. También es malo si ocupo demasiado el espacio de trabajo de Ena-chan".

Además, sería incómodo si alguien como yo estuviera a su lado.

Con eso en mente, traté de levantarme e intercambiar lugares con Ena-chan.

"No, está bien. No habrá ningún problema con mi espacio de trabajo si te quedas cerca."

"¿Eh? No, pero..."

"Lamento tener que hacer que te muevas, y está bien si te quedas a mi lado... Sólo dejémoslo así, ¿ok?".

"¿S-sí?"

Bueno, si Ena-chan está de acuerdo con que sigamos en nuestros lugares, no tengo motivos para negarme.

"...Entonces, ¿reanudamos nuestro trabajo?"

"Si"

Para ser honesto, ya no me interesaba etiquetar los libros.

Por supuesto. Aunque su amor por mí ya terminó, en una situación donde la chica que amo está sentada a mi lado, ¿Qué chico de secundaria en el mundo podría hacer su trabajo sin preocuparse por ello?

Por más que intento ignorarla, mi mirada siempre termina mirando hacia su lado.

(Ena-chan... ella también es muy linda de perfil)

Ya sea que sepa que la estoy mirando de costado o no, Ena tiene el hábito de peinarse con la mano derecha. Cada vez me fijaba más en su cuello blanco y esbelto y en su collar negro a cuadros.

Era una oficina tranquila sin nadie más alrededor. Con la chica que amo sentada a mi lado, usando el collar que le regalé (tal vez).

Qué es esto.

¿Que demonios es esta situación?

Si Ena-chan todavía fuera mi novia, estaría en una situación en la que solo querría abrazarla por los hombros, mirar su cara de sorpresa y tal vez incluso besarla.

(¡No, no! ¡No, cálmate, Souta Sakuhara! ¡Mante tu cordura!)

Por dentro, soy tan ruidoso como una tormenta, pero me las arreglo para poner una cara de póquer con mi férrea fuerza mental.

Sin embargo, como para colmo de males.

"Nnnnnn, nnnn... Parece que mi garganta se encuentra algo mal desde esta mañana".

Tan pronto como Ena dijo eso, giró su pequeño rostro hacia el techo y se frotó la garganta expuesta.

¿Es sólo mi imaginación que me pareciera como si ella estuviera jugando con su cuello... para ser más precisos, con su collar, como si me invitara mi mirarla?

(N-no lo está haciendo a propósito, ¿verdad?)

Como esperaba, el comportamiento de Ena-chan me hizo sentir incómodo y comencé a pensar más en ello.

Mi novia me dejó por la chica más popular de la escuela, pero ella...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora