Suplica

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Los días seguían pasando y la espera era una tortura, el ruido del reloj atormentaba a Arlet y la hacía pensar que cada segundo era una herida más a Derek y ella estaba ilesa sin hacer nada. Arlet comenzó a caminar por toda la base, hablando uno a uno con los soldados al igual que lo había hecho con Ysamar. Su plan funcionaba y poco a poco se comenzaba a reactivar "Vex". La luz empezó a alumbrar una vez más, el ruido estresante volvió a oírse y los soldados volvieron a entrenar. Los días empezaban a tener un poco más de color y todo gracias a Arlet.

Pese a todos sus intentos, que tenían frutos, pasaba horas en soledad fuera de la base pensando y recordando a Derek, recordaba esos momentos de intimidad con él, momentos que los años se llevaron y Arlet apartó por su furia y rabia. Constantemente, buscaba no culparse y herirse a sí misma. Hacerlo, era darse un lujo del cual aprovechó por años, al final, nada había servido más que para acabar con la poca humanidad que le quedaba. En ese momento debía ser más fuerte de lo que nunca había sido.

Hazel y Liv veían desde el exterior del quirófano donde estaba internado Price como todo empezaba a retomar su curso, situación que le parecía extraño, pero no les prestaban la atención que merecían. El diagnostico de Price se acertó y su recuperación era muy rápida, al punto de que sus huesos ya habían curado totalmente, pero aún debía mantenerse en reposo, ya que, seguía sin despertar.

Una noche, Liv notó que Hazel ya había quedado dormida y aprovechando la situación, la dejó sola para ver de qué se trataba todo el alboroto que se había armado. Vio como todos los soldados estaban trabajando e incluso los soldados de elite también se les veía activos llamando a la acción a los demás soldados. Todos repetían la frase que decía: "Agros no nos quitará la identidad". Liv no entendía la razón de la frase y solo estaba más confundida al ver a todos tan emocionados y eufóricos con ganas de arrancar la cabeza de todos los miembros de "Agros". Al seguir caminando, iba sintiendo esas mismas vibras que transmitían todos y fue entonces que vio la razón de todo. Vio a Arlet hablando con tono y posición firme a los líderes, en concreto a Vitale, Walker y Dubois. Los líderes se veían con la cabeza agachada oyendo a Arlet atentamente mientras el diamante los guiaba. Arlet giró la cabeza y vio a Liv mirarla con extrañeza y ordenó a los líderes a movilizar a sus soldados. Los líderes se fueron y Arlet se acercó a Liv manteniendo la misma postura.

—¿Qué estás haciendo? —preguntó Liv manteniendo su enojo, pero intrigante a la vez.

—Cada segundo que pasa le doy la oportunidad a "Agros" para matarlo. No seguiré esperando —respondió Arlet.

—Entiendo, haces bien.

Liv se dio media vuelta y se disponía a regresar con su hermana para seguir a su lado. Arlet la necesitaba, por lo que dejó de seguir dudando y dio el paso que hacía falta.

—Ahora es cuando pido tu perdón —dijo Arlet.

—¿En serio? —preguntó Liv con un tono tajante y dándole la espalda a Arlet.

—No podré si no es contigo.

Liv se dio vuelta y miró a Arlet aún molesta. Se acercó lentamente mientras seguían viendo a Arlet y ninguna de las dos mostraba ningún tipo de intimidación. Liv sonrió y asintió en señal de aprobación a Arlet.

—Detesto que tardes tanto en hacer las cosas —dijo Liv.

—Necesitaba tiempo —respondió Arlet con pena en su voz.

—Lo traeremos de vuelta.

—Necesito de Hazel, no funcionará nada si ella no mueve un dedo.

—Lo sé.

Ambas chicas fueron ante Hazel quien seguía durmiendo. Se le veía en su rostro un cansancio extremo pese a estar durmiendo. Arlet reconoció ese rostro, cualidad que experimentó en carne propia, cuando incluso durmiendo seguías con la mente preocupada y en el mundo real, cuando tus sueños te llevaban a momentos traumáticos y donde ni siquiera se podía dormir en paz.

Liv se arrodilló y movió el hombro de Hazel levemente para hacerla despertar. Hazel despertó de un salto muy asustada creyendo que algo había salido mal. Liv la tranquilizó diciéndole que todo estaba bien y que Price seguía igual. Arlet apareció con cuidado y Hazel entendió al instante de que se trataba todo.

—¿Qué ocurre? —preguntó Hazel mirando a Liv.

—Tenemos que hablar —respondió Liv.

El trío de mujeres se dirigió a una habitación oscura y silenciosa donde nadie pueda oírlas y cerca de la habitación donde Price seguía curándose. Liv se mostraba nerviosa en cierta medida mientras que Arlet estaba firme aún. Hazel seguía intrigada y apurada en regresar con Price, pero Liv intentaba calmar sus emociones.

—Bien, ¿de qué se trata esto? —preguntó Hazel apurada.

—Primero debes estar calmada, Price no ira a ningún lado —respondió Liv con firmeza y haciendo a Hazel tocar suelo.

—Pides demasiado en este momento.

—Entiendo por lo que pasas, también me preocupa Price —dijo Arlet,

—Vaya, no recuerdo haberte visto con nosotras. Si tuviera que adivinar estuviste sola y encerrada en tu habitación —dijo Hazel furiosa.

—Estuvo reactivando a la orden, todo lo que hemos visto es por ella —agregó Liv.

—Sí, genial, creo que puedes encargarte sola.

—Debemos continuar —respondió Arlet. —Sentarnos a lamentar la tragedia no resolverá nada.

—Maldita egoísta infeliz. Solo piensas en como traer de vuelta a Derek —respondió Hazel aún más furiosa.

—Hazel —interrumpió Liv a su hermana. —No hacer nada por Derek, también es egoísta de tu parte.

—Derek tenía un plan, creía que sería una buena idea —dijo Arlet. —Empiezo a entender la última parte.

—¿De qué hablas?

—Es probable que ese factor negativo del que habló, no lo sea. Quizás a lo que se refería es que uno debía quedarse para darle a los demás la oportunidad de atacar con la ventaja de que tenemos a alguien dentro de la torre.

—Quizás se entregó con la idea de que vayamos por él y así atacar todos teniendo en cuenta que Derek podría debilitar los cimientos desde adentro.

—¿Y sí lo tienen prisionero? No podrá hacer nada en ese caso —agregó Hazel buscando bajar la moral de las jóvenes.

—Es probable, pero de todas formas tenemos una oportunidad muy grande con Derek dentro de la base —dijo Arlet manteniendo su postura.

—Derek creía que, si destruíamos los paneles, el campo de fuerza desaparecería y Price podría destruir la base de la torre—agregó Liv a la conversación.

—Sí esta vez lo hacemos toda la base en conjunto, no solo podremos rescatar a Derek, también podemos destruir la torre.

—No se puede destruir así de fácil, creí que Derek era más inteligente. No sabemos a ciencia cierta la función de la "Torre Inicial", probablemente no solo los paneles alimenten al campo de fuerza —dijo Hazel manteniendo su molestia.

—Al menos tenemos algo por dónde empezar —dijo Arlet.

—Pero debemos iniciar cuanto antes, cada segundo que pasa condenamos la vida de Derek —dijo Liv dando iniciativa.

Liv comenzó a caminar y se alejó de Arlet, Hazel la siguió, pero se detuvo antes de alejarse en su totalidad de Arlet. El diamante seguía de pie firme y sin decir nada.

—Ruega con el corazón en la mano que cuando lleguemos, él aún siga vivo —dijo Hazel de espaldas a Arlet para después alejarse totalmente de la joven. 

The Poker's: El Fin de la SuerteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora