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Madame Pomfrey le dijo que solo era un poco de agobio y nerviosismo, así que solo lo dejó quedarse junto a Hermione hasta que se relajara.

Al terminar las clases, Harry no tenía manera en expresar en palabras lo horrible que había sido ese momento en clases, no importaba como lo tratara de explicar, solo recordaba la sensación de agobio y angustia.

Al llegar al dormitorio Gryffindor, Harry rápidamente se cambió de ropa, lanzando con enojo cosas como su camisa y la corbata, había pasado vergüenza, y el recuerdo de ese momento era la pérdida total de su propia respiración.

Estaba muy enojado, especialmente con Malfoy, siempre ahí para arruinar sus días; y ahora ese molesto golpeteo.

Harry no podía con el enojo, no se consideraba alguien violento, pero tenía ganas de golpear el baúl del que estaba sacando sus ropas para cambiarse del uniforme.

Bajó a la sala común, y se desplomó contra el primer sillón vacío que encontró. Los miembros de Gryffindor que estuvieron en la clase de transformaciones cuando Harry tuvo ese ataque de pánico, lo veían de lejos, sentados en las mesas y sillones; cuando Harry se ponía así de nervioso era casi una bomba de tiempo, no solía ser violento, normalmente, pero era mejor no arriesgarse.

–Harry– se acercó Ron junto Hermione, sentándose en los sillones continuos al suyo–, ¿Qué fue lo que pasó?–

–¿Malfoy te puso muy nervioso, Harry?– George habló primero, inclinándose sobre el sillón en el que Harry estaba para que su voz fuese audible y cercana, el tono perfecto para molestar a un compañero.

–¿Fueron sus ojos, o su hermosa nariz?– Fred preguntó después, acercándose más a la oreja derecha de Harry con la única intención de molestar.

Los gemelos Weasley canturreaban, burlándose de lo que había pasado mientras se iban caminando hacia su habitación, siendo regañados por Ronald.

–¡Ahora no, idiotas!– Ron suspiró, normalmente cuando pasaban cosas así con Harry no era simplemente enojo con o por alguien, siempre era algo mucho más grande y peligroso por detrás de esa reacción.

–¿Qué fue lo que pasó, Harry?– Hermione se inclinó hacía él, Harry se restregó los ojos por debajo de los lentes, cansado.

–Llevo todo el día escuchando golpes

–¿Golpes?, ¿Qué clase de golpes?– Hermione lucía preocupada.

–No lo sé, algo como pam pam pam, no sé cómo describirlo.

–¿Como si estuvieran golpeando una puerta?– Harry negó–, entonces es más como un tuku tuku tuku, ¿Verdad?– Ron apoyó sus codos en sus rodillas–, ¿O tukun tukun tukun?

–No lo sé Ron, probablemente-

–¿Pero es desde la mañana?– Hermione interrumpió, estaba demasiado preocupada como para que los dos se mantuvieran intercambiando onomatopeyas sobre cómo sonaba lo que Harry escuchaba.

–Desde el desayuno.

–¿Fue de la nada?, ¿Nadie golpeaba nada o algo así?– Harry negó, lo que provocó que Ron apoyara su barbilla en su mano–, ¿Crees que sea Ya-sabes-quien otra vez?

–Ni lo menciones Ron, ya lo había pensado.

–Harry, si vuelves a escuchar eso, nos lo debes contar, tal vez justo nosotros también lo escuchemos, ¿Ok?, ahora deberías ir a dormir, estás muy estresado– Harry asintió, Hermione como siempre tenía razón.

"I can feel your heartbeat" // DrarryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora