Capítulo 5: Anushka

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Otra mañana de jueves en Luzu, y allí estaba Florencia con sus compañeros al aire en otra edición de “Nadie dice Nada”. La temática del día era “Los innegociables del amor”, donde los oyentes dejaban sus opiniones y los conductores las debatían. Como siempre, Nico era el más crítico con todo lo relacionado con las relaciones, lo que provocó una vez más la indignación en el equipo.

— Siempre lleva las relaciones a un lugar tan oscuro — lo reprendió Flor, que no entendía cómo un día podía estar dándole consejos y al siguiente parecer carente de sentimientos. — Es el Grinch del amor. — determinó, con lo que todos estuvieron de acuerdo.

— No lo soy. — refutó Nicolás convencido. — Ya van a ver cuando me vean de novio. — determinó. — Se van a querer matar. — bromeó, provocando la risa de todos.

— ¿Se imaginan a Nico de novio? — preguntó Santiago, y Flor se dio cuenta de que hasta ese momento le parecía una situación imposible. ¿Nico, otra vez de novio? — ¡Chicos, les presento a Anushka! — le puso un nombre raro a la posible pareja de Nico, y todos estallaron en carcajadas.

— Me tienen como si fuera un témpano de hielo, y no soy tan así. Soy muy cariñoso. — intentó defenderse inútilmente Nico, y Flor se mordió el labio sin creerle nada. En el contexto de streaming, era difícil confiar en Occhiato.

— Me imagino a Nico abrazadito con Anushka. — agregó Nacho casi con asco, y muriéndose de la risa.

Así continuaron especulando sobre la novia imaginaria del jefe “Anushka”: cómo sería su personalidad, su físico, su nacionalidad, su profesión e incluso de qué signo sería o qué auto tendría. Florencia acompañó la situación con risas y bromas, ante la notable incomodidad de su amigo, que intentaba disimular sin éxito.

— Esto me está perjudicando. — se preocupó Nico, y esta vez Flor sí lo notó sincero.

Por un instante, a Florencia se le cruzó por la cabeza la idea, que hace unas semanas le hubiera parecido totalmente descabellada, de que Nico realmente estaba pensando en tener una relación, o tal vez incluso ya tenía a alguien. No sería la primera vez, pero que lo diera a entender en vivo volvía las cosas un poco más serias.

Pusieron al aire un nuevo audio, lo que obligó a Flor a volver a la realidad en el estudio. Debía dejar de disociarse con deducciones absurdas en medio del programa.

— A mí me parece que está bien alguien que me traiga un punto de vista distinto, que me abra la cabeza. — habló Nico sobre su innegociable en el amor, y extrañamente Flor se sorprendió gratamente al coincidir con él.

— Alguien que te sume. — agregó con entusiasmo por la reflexión. — Al final, uno se vincula para transformarse. — concluyó ante la mirada de Nicolás que asentía a sus palabras.

Poco más de una hora después, el programa terminó sin muchos más altibajos. Flor sintió que había salido llena de energía de la productora, y aunque tenía mil y una cosas por hacer, aceptó un almuerzo con una amiga que hacía tiempo no veía. Luego de eso, ya en su departamento, dejándose llevar por la ansiedad y su increíble capacidad de hacer cualquier cosa menos lo urgente, decidió ponerse a idear y coreografiar su próximo show.

Frente al espejo y con música de fondo, Flor intentaba hacer un boceto de la coreografía que montaría para la próxima presentación de “Nadie dice nada”, que no se trataba de cualquier función, sino de su primer estadio Luna Park. Estaba nerviosa, inquieta y un poco asustada, pero todo eso la impulsaba a dar lo mejor de ella. Esta vez iba a agregar bailarines varones además de las bailarinas que ya la venían acompañando. En su cabeza tenía un mapa bastante claro de lo que quería hacer, sin embargo, llevarlo a la realidad le estaba costando. Repetía el mismo paso, los enlaces, sumaba un paso nuevo, y así una y otra vez, pero nada la convencía.

Desde el sillón la observaba Budin, que en silencio la miraba odiado porque tanta música y movimiento lo estaba cansando. ¿Por qué no le había tocado una Karen normal? Flor lo vio a través del espejo, y antes de que este sacara las garras harto, decidió que había sido suficiente ensayo creativo por hoy.

Por otro lado, aún quedaba lo importante que tenía que hacer: armar la valija para el viaje a Bariloche, además, la parte más complicada, llevar una vez más a Budín, que no era precisamente dócil, a la casa de su ex. Caos y más caos, paren esta vida que yo me bajo.

Después de tomar un vaso de agua y antes de comenzar con su valija, se sentó junto a Budín, y cuando agarró su celular encontró el grupo de “Nadie dice Nada 2”, ese que habían armado más para coordinar juntadas o mandarse memes, repleto de mensajes. A su jefe se le había ocurrido armar un canal de difusión en Instagram hace un par de días, lo que obviamente era motivo frecuente de burlas y bromas para el resto del equipo.

“Yo no puedo creer las boludeces que sube, estás grande Nico” escribió escéptico Nacho.

“me mata que se ria en mayúsculas todo el tiempo” sumó Santiago.

“es un abuelo chicos” continuó Valentina.

“peor que ser un abuelo, es ser un abuelo que se quiere hacer el pendejo”  siguió Nacho.

“Es vez de criticarme SUMENSE, A QUIEN AGREGO???” puso Nicolás siguiéndoles la joda.

“antes me mato” respondió al instante Nacho.

“d q ablam!? radio difusion?”  apareció Momi.

“la vieja siempre perdida” volvió a escribir Santi.

“a mi me sumo, y me fui el mismo día, no se los recomiendo” sentenció con sarcasmo Tatiana.

Florencia no podía parar de reír al leer el chat, y cuando de pronto le llegó un mensaje por privado de Nicolás.

“Te sumo al chat de difusión, la gente te pide”

”QUÉ? NO”  contestó Flor, pero no fue lo suficientemente rápida porque ya la había agregado.

“esto no se hace Occhiato, ahora sí me vas a tener que dar el maldito aumento” lo amenazó en broma por privado, y este solo le respondió con un “JAJA” .

Flor descargó las ganas que tenía de pelear con él por molestarla en el mismo chat de difusión, pero al ser público no pudo expresarse como más le hubiera gustado. Se contuvo de seguirla por WhatsApp, ya que la última vez que habían hablado terminó con una invitación a su departamento, la cual, como si fuera una nena de quince y no una mujer de casi treinta, la rechazó con una excusa inventada. Aunque seguramente se estuviera sugestionando y Nico no tuviera más intenciones, lo que realmente la preocupaba eran sus propias dudas.

Una creciente incomodidad la invadía ante la situación con Nicolás. A pesar de una amistad de años que los unía y su posición como jefe, no podia hacerse la tonta y no reconocer que un ambiente particular se había generado entre ellos.  En el peor momento, y con el menos indicado. Esto no tenía ni presente, ni futuro.

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Bueno capítulo cortito, xq me quedaba muy largo, prometo subir rápido el siguiente 🙃

Lo que más tardo es en buscar las fechas y situaciones, pues mi memoria me falla, igual y seguro me equivoco, pero bueno, licencias autorales por la trama (???

Gracias por leer ❤️

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