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Goku venía todos los días, generalmente justo antes del amanecer, para hacerle compañía a su amigo. Vegeta se había resistido firmemente al principio, pero finalmente se dió por vencido, ya que nada de lo que dijera cambiaría la opinión del otro. Al principio, la aparición de Goku usando su técnica de teletransportación, lo había asustado muchísimo, pero se acostumbró después de un par de días.

Y Goku aprendió a anunciar su llegada.

Las mantas y sábanas fueron retiradas con bastante violencia ese día, como lo hacía desde que Goku asumió el papel de cuidador. Luego abrió persianas y las ventanas, para permitir que Vegeta "saludara el día", como lo llamó Goku.

Y como de costumbre, Vegeta refunfuñó y se dio la vuelta, poniéndose la almohada sobre la cabeza.

"¡Vamos Vege! ¡Levántate y brilla!" Goku llamó mientras lo levantaba y lo empujaba hacía la ducha.

Vegeta murmuró algo medio dormido, y miró a Goku entre los párpados medio cerrados.

"Kakarotto, espero que mueras hoy."

El otro saiyajin se rió a carcajadas y sacudió la cabeza. "Dices eso todos los días."

"Y sabes que lo digo en serio todos los días".

Goku se detuvo abruptamente y le lanzó una mirada que podría haber hecho sentir mal incluso a Cell. "No, no lo sabes. Simplemente todavía no te has dado cuenta". Y esa declaración fue la primera cosa singular que dijo en toda la semana.

Antes de que se pudiera responder algo, Goku ya no estaba. Volvió abajo para empezar a desayunar. Vegeta se quedó allí por unos momentos, tratando de descubrir qué quería decir exactamente con eso, para luego símplemente encogerse de hombros y entrar al baño.

Si necesitaba saberlo, se le pensaría más tarde.

Al final de la semana, Goku en simples palabras se había mudado con Vegeta. Cocinó sus comidas (y se aseguró de que Vegeta las comiera), programó visitas (y se aseguró de que Vegeta no le gritara), y también hizo que Vegeta entrenara con él para mantenerse en forma. El corazón del saiyajin más bajo no estaba para eso, pero era mejor que nada. Sin que Goku lo supiera, los demás también estaban preocupados por él mismo.

"No debería estar haciendo todo eso por Vegeta", le dijo Goten por teléfono a su hermano. "¿Qué hay de él mismo?"

Gohan estuvo un poco de acuerdo pero tenía otra idea. "Está sucediendo algo aquí que no sabemos..." Luego usó la llamada grupal para llamar a Bra.

"¡Hola, hola!", respondió casi de inmediato.

"Estamos con Gohan, tenemos una crisis".

Tanto Goten como Bra hicieron señas a los otros dos para que retomaran la línea.

"Sé lo que vas a decir", respondió Bra. "Goku está pasando mucho, demasiado tiempo con papá".

"También dirás que no es saludable", añadió Pan desde otra extensión de la casa que ella y Bra compartían.

"Bueno", dijo Trunks. "No estamos de acuerdo contigo".

"¿Qué quieres decir?" Preguntó Gohan, un poco sorprendido. "¡Vegeta está perfectamente bien!"

"Físicamente lo está", dijo Bra en voz baja. "Pero no emocionalmente. Y tu padre lo sabe".

"Él es el único que sabe lo que pasa por su cabeza", añadió Trunks. "¿Recuerdas lo que pasó hace tres años? Incluso el guerrero más fuerte del universo puede perder el juicio. Goku simplemente no quiere que esto le pase a un amigo".

Hubo silencio de varios minutos, hasta que una pequeña voz habló. "Tengo que estar de acuerdo con ellos, hermano", dijo Goten. "Puedo entender su punto. Dejémoslo así por unas semanas más".

Eran cuatro contra uno, Gohan sabía que era inútil seguir discutiendo. "Bien", dijo de mala gana. "Ya lo veremos."

El Salvador De Su Alma | Kakavege [Fanfic]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora