I Had No Choice [King Boo X Luigi]

Extra| Deseo

Nunca pudo conseguirlo.

Aunque vigile cada rutina, cada camino que decidía seguir. Nunca logró dar con su hogar. Pero, si pudiera, iba a destrozarlo todo.

No lo logró.

Al frente había una sombra, que parecía más una brillante luz en la profunda oscuridad, vigilaba cada movimiento que no fuera el suyo. Se movía apresurado, con prisa.

Por fin llegó.

Estuvo tan cerca tantas veces. Pero ninguna logró salir victorioso.

Cuando pasaba por el habitual camino que Luigi siempre tomaba, tarareando en algunas ocasiones, intentaba acercarse. Con magia, lo que fuera, pero ni siquiera fue capaz de tocarlo.

No lo entendía.

Lo había hecho infinidad de veces, y cuando estaba apunto de conseguirlo, él desaparecía en la nada.

¿¡cómo puede ser eso posible!?

Nunca pudo descifrarlo.

Estaba donde habitualmente solía quedarse a esperar, sin cambiar la rutina. Observando, como siempre.

Aún teniendo conocimiento de que la esperanza era sólo algo en lo que alguien decidía creer para seguir intentando, sin rendirse, sin sentirse como unos fracasados. Fue entonces que se dio la oportunidad de sentir tal esperanza.

Recordando todas las veces en las que fracasó, siquiera intentado tocar. Una sensación que lo confundía por completo, algo que no le permite atravesar una barrera, una invisible, algo de lo que simplemente no era consciente.

En esta ocasión Luigi parecía nervioso, asustado. Ya no tarareaba. En cambio, caminaba con rapidez y cuidado, atento a cualquier movimiento fuera de lo común.
Casi por un segundo creyó haber sido descubierto, con la intensa mirada de Luigi, penetrante en la oscuridad. Ojos brillantes de un hermoso color zafiro, parecía estar viendo directamente a los suyos. Con unos segundos de tensión, finalmente se apartaron sin indicios de haber visto algo.

Deseó poder arrancar esos lindos orbes y conservarlos para su gusto.

El poder vale más que el desear.

Nunca creyó desear tanto algo hasta que se le negó el chance de tenerlo. El querer algo, pero no poder obtenerlo, hacía que aumentara su deseo por poseerlo. Fue entonces que, sin darse cuenta, había logrado obsesionarse con Luigi.

El tonto hermano de Mario.

El héroe.

Era más que un capricho, un deseo. No soportaba no poder verlo. No poder tocarlo. No poder infringir dolor a su persona. Porque eso era lo que quería, causarle dolor era lo que más rondaba por su mente.

Nunca dejarlo ir, si tuviera la oportunidad de tenerlo. Tal vez tener algo más que sólo su cuerpo y presencia, algo como su alma. No se desgasta, su espíritu seguiría intacto. Era algo que podría tener por toda la eternidad. Algo que él podría mantener impoluto. Algo que al fin pueda poseer y que no desaparezca.

Que no desaparezca como él siempre hace.

Notas:
Capítulo corto, modificado porque tiene más sentido que el anterior, para mí, si hubiera tenido la oportunidad ¿por qué no matarlo y ya? Mi pregunta después de escribir el anterior.
Ahora sí tiene sentido.
Ojalá a alguien le guste el cambio.
Gracias por leer.