VIII - La verdad del Fan

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Jiang Cheng había estado tranquilo en su mañana.

Raro si pensamos en su querido hermano adoptivo.

Pero todo cambió al levantarse de la cama y sentir una cosa sobre si.

Al principio intento ignorar el peso, pero una voz extrañamente familiar lo despertó completamente.

-Jin Ling!!! ¿Donde estoy? Se supone que estaba en la carretera llendo a entregar a Jin Ling y... ahora...

Al verse ambos no se pudo evitar lo que siguió.

Un grito se oyo en todo GuzuLan, que por ser un lugar tranquilo y silencioso se oyo.

Corriendo llego la Matriarca del clan con su esposo.

Sabían cual era la reacción de los que lo verían por primera vez. Y además, ellos lo enviaron al pasado.

-Joven Jiang... ¿Se encuentra bien?

Jiang Cheng asintio y mostró al pequeño en shock.

La boca del Xishen estaba muy grande y miraba un punto fijo.

El pequeño Xishen de Lan Yunlin se acerco y verifico al Xishen en las manos de Jiang Cheng.

Después de revisar al Xishen, les explicaron muchas cosas que el pobre líder Jiang apenas proceso que había viajado al pasado y que por lo que le decían había muerto de alguna manera.

Poniéndose a pensar su mente viajo al recuerdo del viaje al clan Jin. El pequeño Jin Ling de tres años jugaba con un juguete de madera. Un movimiento fuerte había sacudido el carruaje y después una explosión... después no recuerda nada.

Allí se dio cuenta que había sido asesinado y no tenía idea de que había pasado con su sobrino.

Sin poder evitarlo comenzó a llorar a mares.

Su vida, su clan, su sobrino, su... su familia...

-¿Que pasa?

La voz de su joven vercion lo veía y no podía dejar de llorar, estar en esta forma y su nueva situación lo tenía de esa manera.

No podía dejar de llorar.

-Ya que hemos aclarado todo. Nos iremos si quieren pueden hablarlo un rato.

Unas horas más tarde Jiang Cheng estaba de camino a la biblioteca en busca en busca de Lan Xichen.

Su camino se interrumpió por la velocidad en la que su Xishen había salido disparado a un sitio.

-Gege!!

-¿Qué? – la voz de Wei Wuxian le llamó la atención.

El Xishen estaba en un abrazo estremecedor.

-Shidi...

-Gege! No me dejes, te lo prohíbo. No puedes dejarme... lo prometiste.

Las lágrimas salían del Xishen.

Wei Ying miro la pequeña vercion de su shidi y dejo que se desahogara.

-Ya, ya... ¿sabes la cantidad de veces en las que he dicho eso en el día?

-Gege...

-Wuxian...

Ambos Jiang Cheng hablaron al mismo tiempo.

-¿Y si lo hablamos?

Los tres fueron a la biblioteca encontrándose con Nie Huaisang que mostraba a su pequeña vercion de forma orgullosa.

-Miren chicos ya tengo el mio. ¿Será que La Matriarca me dejara entrar en su clase?

Los dos Huaisang miraron a los chicos notando una cara roja del pequeño Cheng.

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⏰ Última actualización: Feb 24 ⏰

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