27 de febrero
Lunes a la salida, recuerdo hablar con Mel sobre Jed y decirle que creía que me gustaba, pero que realmente me gustaba, de esas veces en las que todo tu cuerpo suda y tus piernas se derriten, del tipo del que solo quieres que te bese y ya.
A la salida nos sentamos en la recepción, Brandon, Mel, Jed y yo, él, sostenía mi suéter y para no parecer obvia y porque era divertido tomar fotos panorámicas, lo use como mi musa, porque en realidad lucia tierno.
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Serendipia
Teen FictionUna vez más, me veo compelida a redactar, aunque lo que emerge es algo nefasto y estulto. No obstante, debo admitir que se gesta tempranamente en mí un gusto diminuto pero fulminante hacia tu persona. Yo, niña pretensiosa y mimada, tú, un sujeto ame...