Yo en mis brazos, déjame abrazarte, déjame estar junto a ti, nunca te dejaré, nunca te dejaré ir, solía decirme: nunca me enamoraré hasta encontrarlo, dije que nunca volvería a caer a menos que seas tú por quien caiga, estaba perdida en la oscuridad y te encontré a ti, pequeña luz.
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Serendipia
Teen FictionUna vez más, me veo compelida a redactar, aunque lo que emerge es algo nefasto y estulto. No obstante, debo admitir que se gesta tempranamente en mí un gusto diminuto pero fulminante hacia tu persona. Yo, niña pretensiosa y mimada, tú, un sujeto ame...