SI ME AFERRO A TI DUELE, PERO SI TE DEJO IR DOLERÁ AÚN MÁS.

Incomodo~

Despues de haber salido corriendo avergonzada __ de la habitación de Leo, fue directo a su sala esperando a que su amigo saliera, obviamente ya con ropa. "...."
___ no sabia que hacer, decir o pensar, simplemente esa situación, esa vista la había dejado en un tipo shock. Nunca había imaginado algún día haberse encontrado a Leo asi. Y mucho menos creyó que su amigo tendría un cuerpo tan perfecto. Comenzaría a fantasear con su cuerpo y ese momento nunca lo olvidaría. De eso no tenía duda.

*Leo PoV*

Cuando salí nunca creí haberme encontrado con __ en mi habitación. No sabía que hacer. Estaba practicamente desnudo frente a ella. Queria huír o algo pero mi cuerpo no reaccionaba. Solo podía sentir como mis mejillas ardían. Miré el rostro de __. Realmente parecía perdida observando mi cuerpo y yo... Yo no hice nada. No quite mi vista de __ quien al parecer no se perdía ningún detalle de mi cuerpo. Llevaba ya bastante tiempo mirando, noté como esta mordía su labio y parecía perdida con una mirada lujuriosa. Si, al parecer veía una parte importante que resaltaba por debajo de la toalla que llevaba enrollada a la cintura. Subió su mirada a mi rostro que la miraba tímida y con asombro. "Diós ___! Deja de mirarme así o juro que terminarás provocandome y despues de eso ya no habrá vuelta atras.." Pensé. ¿Por qué me venían ese tipo de pensamientos ahora.
Al cruzar miradas con ___ supe que despues de tanto tiempo al fín había reaccionado. Pues tenía la cara totalmente sonrojada con una mirada avergonzada y apenada con un poco de pánico en ella. Y fue ahí cuando en un abrir y cerrar de ojos ella ya había huído de ahí cubriendo su rostro no sin antes gritar un 'lo siento'. ¿Pará que cubre su rostro si ya vió todo?~
Solo me limité a negar con la cabeza mientras reía levemente y comenzaba a vestirme.

*___ PoV*

Mientras seguía sentada en aquella sala ajena esperando a Leo, no podía aún quitarme esas imagines de mi mente.
Mordí mi labio inconscientemente al recordar aquel bulto que se hacia por debajo de la toalla. "Rayos, ¿Còmo no se le cayó en ese instante esa maldita toalla?" Pensé, y DIOS! ¿Qué me había pasado? Me estaba volviendo una pervertida. Ahora que reaccionaba nunca había pensado o fantaseado algo parecido por ningún chico.
Seguía en aquella posición mordiendo mi labio recordando todo y abrazandome con un brazo el vientre que sentía arder por alguna extraña razón. Tenía la respiración algo agitada. No sabia si era por aquella nueva sensación que sentía en esos momentos o por el simple hecho de haber salido disparada desde el segundo piso hasta la sala.
Y fue ahí cuando escuche ruido y sentí como a mi lado el sillón se hundía. "..Pero qué..?!"
Volteé y ahi estaba a mi lado Leo, quien me sonreía en parte nerviosa y avergonzada y en parte burlona y.. ¿Lujuriosa?
Como fuera que me estuviera mirando comenzaba a ponerme nerviosa e incomoda. Nunca durante estos 2 meses había notado una mirada proviniente asi de el. Seguía mordiendo mi labio con fuerza. Seguro que era por los nervios, mjum. Su mano se acercaba a mis labios y podía escuchar los acelerados latidos de mi corazón retumbar por todo mi cuerpo. Solo deseaba que el no pudiera oirlos tambien. Su mano seguía acercandose a mi rostro lentamente y fue ahí cuando sentí un frio recorrerme toda la espalda. Había colocado su mano al lado de mi mejilla y acariciaba mis labios. Su mirada en esos momentos era profunda y perdida, y estaba totalmente serio.
"No lo muerdas..." Musitó con su suave voz apenas oíble sin dejar de acariciar mis labios. Abrí mis ojos como platos. Estaba impactada, asombrada, aterrada, nerviosa, sorprendida y mil emociones más. No sabia que hacer o como reaccionar. Era la primera vez que me ponía asi por un chico; todo era tan raro y mas siendo el mi amigo y tener poco tiempo de conocerlo.
Solo pude soltar mi labio el cual me dolía un poco y mirar fijamente a Leo a los ojos.
No entendía nada en ese momento, y todos los recuerdos de ese día se hacian presentes. Su falta al colegio, el comportamiento raro de Hyuk y la madre de Leo, el encontrarmelo semi desnudo y ahora esto. ¿Qué tenia planeado para mi hoy el destino? "Diós, ayúdame..~"
Y como si mi petición hubiese sido escuchada, un teléfono sonó. Al parecer era el mio. El cual que la vibración me hizo reaccionar y contesté de inmediato incorporandome en el sillón.