CAPITULO 11 - UNA BAR NORMAL

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"¿Tú crees que luzco bien?"

Day preguntó mientras estaba en el auto en silencio, August había confirmado el lugar y el horario desde el inicio del día y le aseguró que no tendría que esperarlo, que llegaría a tiempo sin importar qué. Esta vez no habría inconvenientes. Sólo aquella vez no salió nada bien, pero ya no se verían en Phillipe porque no consiguió reservación, así que August le dijo que se encontraría en un bar al que solían ir. Era pequeña, amigable y no había mucha gente.

"Actúas como un adolescente en su primera cita." Se burló Mhok.

"¿Cómo? Wow." Day dijo, sintiendo que se sonrojaba un poco.

"Te has arreglado el dobladillo de la camisa unas veinte veces, un poco más y te traeré una regla."

"Ya lo medí, así que ya sabes lo emocionado que estoy." La otra persona respondió en tono casual. "Bueno, August me dijo algo extraño. Cuando me invitó me dijo: no pongas excusas, pero su tono... no parecía normal, ¿Qué opinas?" Dijo abiertamente.

"¿Por qué? Cómo era su tono."

"Como si suplicara Phi, no sé cómo explicarlo."

Una vez que lo dijo, se sintió avergonzado. Desde el principio, no sabía si estaba sonrojado o no, pero ahora se sentía con más confianza. Mhok sólo se rió, pero no dijo nada. Day había llegado allí después de perdonar a August, aunque él no había escuchado la historia completa de lo que pasó ese día, pero lo había interpretado un poco más allá con lo que el mismo pudo ver.

"Creo que le voy a confesar mi amor a August hoy." Dijo y la atmósfera se envolvió de silencio nuevamente.

"En serio..."

"Probablemente no tenga nada que perder, pero al menos quisiera ver su expresión antes de no poder ver más nada. Sólo quiero decírselo antes de que sea demasiado tarde."

Mhok no dijo nada, pero gentilmente apretó su mano en su hombro como señal de simpatía. Y después de eso, durante el resto del camino, el ambiente volvió a quedar silencioso. El joven tenía muchos locos pensamientos en su cabeza, especialmente porque se confesaría hoy y puede que la respuesta que recibiera no fuera la esperada. ¿Cómo debería proceder de ser así?

"Llegamos... te llevaré a la tienda."

El auto se detuvo y las palabras del conductor lo despertaron de su ensueño. Espero que la otra persona abriera la puerta antes de salir y tomar una gran bocanada de aire, tomando confianza. Tomó el brazo de Mhok y lo siguió hasta la tienda donde había hecho la cita con August. Viejos recuerdos vinieron a él. A él y a August les gustaba escaparse en secreto del entrenador para beber algo juntos aquí, ya que nunca había mucha gente y además se hicieron cercanos al dueño de la tienda, así que era difícil que la historia llegara a los oídos del entrenador.

"Estamos frente a la tienda."

Habló el mayor, entonces su mano se movió para abrir la puerta, sintiendo el aire que provenía del interior, la frescura flotó a su alrededor haciéndose sentir. Mhok caminó dentro y pudieron escuchar una suave melodía, música suave que los recibía. Day sacó su teléfono para llamar a August.

Day buscó a tientas su teléfono celular para sacarlo y llamar a August, pero aún no lo había conseguido. Cuando de repente se escuchó un estruendo y se vieron papeles volando, la imagen borrosa que se presentó frente a Day eran muchas personas y objetos que parecían ser globos coloridos.

"¡Feliz cumpleaños Day!"

August caminó hasta que Day pudo verlo claramente, aunque no se acercó lo suficiente, el sonido del canto de feliz cumpleaños resonó por todos lados. Las voces mezcladas y las voces de muchas personas le trajeron buenos recuerdos, debieron haber venido todos sus amigos del grupo de bádminton. Day mantuvo a raya su entusiasmo, pero no completamente. No por la cantidad de personas, sino porque a sus ojos parecía haber algo más en la actitud de August.

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