Last Twilight: Una novela de drama romántico con una trama intensa. No sólo es una conmovedora historia de amor, sino que también te enseñará, a partir de las vivencias de los personajes, que, a pesar de las dificultades, la vida continúa. Si aprend...
La cirugía de reemplazo de córnea tuvo lugar después de que el centro de donación de ojos se comunicara con Day hace tres días. Primero tenía que comprobar su estado físico, hacerse pruebas de compatibilidad básica de tejidos y finalmente fue operado. Todo salió bien. Pasó un tiempo con los ojos vendados, el cual estaba programado ser quitado en aproximadamente una semana después.
El período de recuperación mientras esperaba abrir los ojos estuvo lleno de molestias, aunque el médico enfatizó que la posibilidad de no poder ver era bastante pequeña, igual eso no significaba que no podría llegar a suceder, aunque no era lo peor, porque aunque no pudiera ver, aún podía someterse a una nueva cirugía de reemplazo de córnea, aunque nuevamente debería entrar en la lista de espera y nadie puede garantizar cuánto tiempo duraría o qué tan corto será.
"Si estás listo, por favor, abre los ojos lentamente."
Le dijo el doctor que acababa de quitarle el vendaje, todos estaban juntos allí, su madre, su hermano y Mhok.
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"Al abrir tus ojos por primera vez, intenta mirar a tu alrededor, al principio las imágenes puede que no sean claras. Por favor, dime primero si puedes ver o no, si puedes, deja que tu vista descanse un poco. Tómate diez minutos para acostumbrarte, luego abres los ojos y miras otra vez. Cada vez las imágenes te resultarán más claras."
Dijo el oftalmólogo mientras lentamente le quitaba el vendaje que había estado cubriendo sus ojos. El joven sintió que las vendas se soltaban poco a poco, pieza a pieza, hasta que finalmente quedó libre. Tomó un respiro profundo. Su madre sostenía su mano fuertemente. Day abrió sus pestañas lentamente, abriendo los ojos lo más lento posible.
"Yo... puedo ver." Dijo, cerrando los ojos con lágrimas brotando de ellos. Night pegó un grito de alegría, seguido del llanto de su madre. Mhok no dijo nada, sólo apretó su hombro levemente, las lágrimas del joven seguían fluyendo, caían continuamente, sollozando como su madre.
"Entonces me gustaría ir a informar a la enfermera para que prepare el cuarto de examinación, en diez minutos vendré a buscarte. Mientras tanto, mantén los ojos cerrados, y espera a que regrese." Dijo el médico.
El joven asintió, antes de escuchar el sonido de pasos fuertes saliendo del cuarto y luego la puerta se cerró. Dejó salir un largo suspiro, levantó su mano y se limpió las lágrimas. No había nada que hacer, sólo se lamentaría después.
"¿Puedo hablar con Phi Mhok en privado cinco minutos?"
Day habló mientras se recostaba en la cama con los ojos cerrados. Su madre y su hermano aceptaron su pedido, aunque no entendían muy bien, pero salieron del cuarto y Day esperó hasta escuchar que la puerta se cerró completamente.
"Felicitaciones Day. Vuelves a ser el mismo de antes."
Una mano familiar lo alcanzó y lo tomó del brazo, pudo sentirlo. Era la misma calidez que siempre había recibido de ese hombre, aquella que le había salvado la vida ese día.
