~ 12 de Diciembre ~

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¿Y si me tiro desde la terraza? Tercera vez en el día que me lo planteo.

Os preguntareis porque estoy así de histérico... más de lo habitual. Pues es que vengo de hacer "Unholy" con Álvaro y Bea. La semana fue larga y difícil de trabajar, no por ellos, si no por mis mierdas y mis inseguridades. Pero al final la actuación salió bien y fue un numerazo (según palabras de todo el mundo). Pero si yo me creía que eso había sido difícil de preparar, no me podía ni imaginar lo que iba a ser esta semana.

En el reparto de temas casi me da un soponcio. Porque sí, señores, me toca hacer un dúo con Martin... En serio, ¿cuántos metros habrá desde la terraza hasta el suelo?

La canción no podía ser más pastelosa, pero es que viene de Love Actually... Socorro, no sobrevivo a esta gala...

La toma de tonos con Manu y Noemí fue bien; decidimos quien cantaba cada parte y listo, nos fuimos con Abril mientras los demás iban pasando poco a poco con sus canciones. En algún momento noté a Martin más decaído de lo habitual, pero ignoré ese detalle hasta la merienda, cuando de un momento a otro estalló y se puso a llorar de la nada. Obviamente todo el mundo se acercó preocupado. Menudo agobio. Dejad que se calme primero el chaval, ¿no?

Ruslana me mira de manera inquisitiva y no entiendo muy bien por qué. Ni que yo le hubiera hecho algo. No está así por mi culpa, ¿no?

Noemí aparece de la nada, como siempre que alguien parece tener algún problema, y Martin decide salir con ella. El grupo se dispersa, pero para mi desgracia, algunos compañeros como Almu, Álvaro y Bea se interesan también por mí. ¡Pero si yo estoy bien! El problema es que como sigan preguntando voy a terminar llorando, y ni siquiera sé el porqué. Justo cuando Alex Márquez también se acercaba, vuelve Martin.

- Una lloradita y a seguir –dice Noemí, haciendo sonreír avergonzado a Martin.

- A veces hacen falta –confirma Bea.

Álvaro se acerca de nuevo y le abraza mientras mis ojos no pueden dejar de fijarse en lo rojos e hinchados que están los suyos. Pues sí que ha llorado...

- Sabes que conmigo puedes hablar de lo que quieras cuando quieras –le dice el sevillano.

- Conmigo también – se le une Bea.

Esas palabras y la forma en la que Martin les sonríe agradecido, hacen que algo se me remueva dentro.

- Conmigo también –digo un poco más bajito clavando en él mi mirada durante un instante.

La cocina empieza a recogerse y casi todo el mundo se ha ido ya con los profesores asignados. Martin recoge sus cosas en silencio. Sé que todavía hay algo dentro de su cabeza dando vueltas.

- ¿Qué te picó para acabar llorando? –pregunto a la vez que me acerco a él para abrazarle.

Dios... Siento como sus brazos se enroscan a mi alrededor mientras mis manos le acarician la espalda. Pero las caricias en seguida se convierten en palmadas amistosas en cuanto soy consciente de lo que hago y de las cámaras que nos rodean. El abrazo es corto, demasiado corto, pero también cálido.

- Ya te contaré... -susurra mientras se aleja.

Media hora después, el ansia por empezar a trabajar la canción empieza a carcomerme. Algo de lo que se da cuenta incluso Violeta.

- Juanjo, hijo, relájate que tienes una canción de amor...

Ella, junto con Martin, sigue burlándose un rato más hasta que Vic nos hace pasar a su clase.

Entre capas (EN PAUSA INDEFINIDA :( )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora